miércoles, 30 de junio de 2010

POR FIN UNA VERDAD/ Gustavo Carrión Zavala

En las últimas semanas el escenario nacional ha estado invadido por noticias vinculadas a indultos, beneficios penitenciarios, rebrotes terroristas, requisas inopinadas y toda la parafernalia que acompañan a estos temas.

Nos referiremos en inicio al beneficio de liberación condicional concedido por una jueza a la confesa integrante del MRTA Lori Berenson. Los que hemos tenido actuación en el sistema penitenciario, sabemos lo difícilmente readaptable de esta interna, la que durante su internamiento en los establecimientos penales del sistema, provocó levantamientos, huelgas, tumultos, enfrentamientos con la autoridad penitenciaria. Estas acciones recurrentes motivaron que sea trasladada a otros penales, como el de Huacariz de Cajamarca, para evitar que siga subvirtiendo el orden en el penal de máxima seguridad de Chorrillos. A pesar de estos acontecimientos, fue evaluada favorablemente por el órgano de tratamiento penitenciario de este último penal, al cual fue retornada por razones de maternidad. En este caso no se le practicó previamente al informe favorable, ningún tipo de requisa o indagación que pudiese ilustrar al órgano técnico o posteriormente a la autoridad judicial; probablemente si esto hubiese ocurrido se habrían encontrado indicios de su nulo arrepentimiento y de su persistencia en las ideas y conspiraciones que la llevaron a prisión, lo que nos hace presumir que todo este proceso obedecía a un libreto previamente escrito.

Una vez que se le concedió el beneficio, supuestamente como corolario al libreto coordinado con antelación, el hecho tuvo el agregado valor de atribuirle la culpa al gobierno anterior, por haber aprobado el dispositivo que concedía la posibilidad de redimir la pena por educación o trabajo a los sentenciados por terrorismo, en cumplimiento a una sentencia supranacional, interpretada y sancionada por el Tribunal Constitucional.
Como no aprovechar esta favorable oportunidad para desacreditar a quién parece ser el objeto principal del odio de Alan García y a quién se refiere sin nombrarlo, cuándo afirma que no pone presidentes, pero que sí puede impedir que llegue el que a él no le gusta y salir a declarar sin rubor alguno que el beneficio concedido ha sido provocado por el anterior gobierno, como si no estuviera casi en la puerta de salida de su segundo quinquenio.
Se ha deslizado también, sin aportar cifras aclaratorias, que la mayoría de los terroristas que han obtenido su libertad lo han hecho al amparo Del Decreto Legislativo 927, promulgado por el gobierno de Toledo. Al respecto sería pertinente que el instituto penitenciario publique la relación de los terroristas liberados con indicación de las leyes con las cuales fueron sentenciados, y seguramente encontraremos que gran cantidad de ellos fueron procesados y reprimidos penalmente con las leyes anteriores a 1992, o mejor dicho con las leyes que provenían de los gobiernos de Belaúnde y el primer gobierno de García.

Después de mucho hablar y sugerir que el anterior gobierno es el responsable de los terroristas liberados, los cuales estarían provocando el supuesto “rebrote de Sendero”, surgen las rectificatorias y enmendadoras declaraciones del premier Velásquez Quesquén, quién en sujeción estricta a la verdad dice que los informes del INPE respecto a los internos que solicitan beneficios penitenciarios, no obligan a los jueces a concederlos, o dicho de otra forma, no son vinculantes para la autoridad judicial, y no lo son por una simple razón, cuándo desaparecieron los jueces de ejecución penal, encargados de vigilar el cumplimiento de la pena, esta facultad recayó en el juez que había sentenciado, ergo esta autoridad debería indagar antes de conceder el beneficio, la forma como se había comportado el solicitante durante su permanencia en el penal.

Además en el caso de Lori Berenson, no necesitaba ni siquiera indagar, sólo revisar la prensa para constatar los innumerables problemas que generó durante su carcelería. Pero en fin, las declaraciones de Velásquez deben poner fin a la discusión y aclarar definitivamente que son los jueces quiénes conceden o no los beneficios, y que al así manifestarlo el propio presidente del consejo de ministros, no sólo está diciendo por fin una verdad, si no que al hacerlo, probablemente sin proponérselo, está enmendando la plana al propio presidente García, quién se adelantó a atribuir la culpa del beneficio al gobierno de Toledo.

sábado, 26 de junio de 2010

AL ENTRAR A OCTAVOS DE FINAL/ Luis Pásara

Primero, no estoy viendo la calidad de fútbol que esperaba. Esta constatación es aparentemente contradictoria con el hecho de que la globalización ha conducido a que todos los equipos manejen las mismas técnicas, que los estilos nacionales tiendan a disolverse, y que no haya equipos chicos: algunos "grandes" –Francia e Italia– han sido eliminados y varios "chicos" –como Corea del Sur, Japón o Ghana– están en Octavos.  

Segundo, los favoritos se han derretido. Aparte de los eliminados, el caso más claro es el de mi favorito, España, que ha pesado a Octavos con pena y sin gloria. No convenció ni derrotada ante Suiza, ni ganadora en los otros dos partidos. No se entiende cómo el equipo que venía jugando mejor está dando este espectáculo.

Tercero, pobres en goles –pese a los extraños de la pelota que la FIFA introdujo precisamente para que hubiera más goles–, muchos partidos tienden al aburrimiento y transcurren a la espera de que alguna circunstancia especial –como en el primer gol de España a Chile– o algún error de portero conduzcan a un desenlace impredecible. No se ven sino algunos momentos de buen fútbol. Entre ellos, me quedo con el primer tiempo de México-Uruguay.

En medio del creciente hartazgo generado por ese permanente zumbido de abejorros, que obliga a bajar el volumen del tv, hasta aquí el Mundial no llena mis expectativas.

viernes, 25 de junio de 2010

¿QUIÉN ES EL PRINCIPAL ANUNCIANTE EN LAS TRASMISIONES DEL MUNDIAL? /Carlos Basombrío Iglesias

Tanto en Canal 9 como en RPP la publicidad gubernamental es abrumadora.

No sé si es la pauta más grande pero a diferencia de las privadas, este apabullante autobombo se paga de nuestros bolsillos.

¿De cuánto estamos hablando?

Kurt Burneo en un artículo en La República nos lo dice:

“…el año pasado los gastos por servicios de publicidad, difusión e imagen institucional realizados fueron de S/. 143 millones, de los cuales el gobierno nacional gastó S/. 132 millones y los regionales S/. 11 millones; y para este año tienen presupuestados otros S/. 216 millones adicionales, de los cuales muy diligentemente al 13 de junio, el gobierno nacional ya gastó S/. 52’303,990 en publicidad más S/. 1’878,110 en imagen institucional.

No es moco de pavo.

¿Qué pensaba el presidente García cuando asumió el poder en el 2006 de los presidentes que priorizan así los gastos?

“El Perú ve al Estado y al sistema político como centros de frivolidad y de nepotismo, como nombramiento de parientes y partidarios, como empleo público que se agiganta pero no se descentraliza ni sirve bien, como oportunidad de viajes placenteros, publicidad vanidosa, asesores innecesarios”.
En el mismo discurso entregó un conjunto de decretos y proyectos de ley para el capítulo de la austeridad. Entre ellos

“El que limita a la 5ª parte el gasto de publicidad de las instituciones”.

Parece que con el paso de los años dividir entre 5 se convirtió en multiplicar por cinco.

Pero como recordar es volver a vivir veamos cómo se concibió más ampliamente la austeridad y la lucha contra la corrupción en el discurso inaugural el 2006:

Pero austeridad significa también que en el Estado no se contratará ni una persona más de las que ahora existen. Austeridad significa que para los cargos indispensables de la actividad administrativa se usara un concurso público de méritos, supervisado por los colegios profesionales. Austeridad significa también que en estos 6 meses prepararemos y completaremos el proyecto de compra estatal conjunta. Hasta ahora cada ministerio, cada dirección, cada gobierno regional, cada institución compra útiles, papel, combustible, electricidad, teléfonos, bienes, vehículos, uniformes, seguros, etc. Cada uno por su lado, pagando precios diferentes y altísimos. Con la compra conjunta y electrónica y con el procedimiento de subasta pública y subasta inversa eso cambiará.

Nos proponemos alcanzar en año y medio a comprar en conjunto el 30 por ciento de todas las adquisiciones y ahorrar en ese primer tramo 250 millones anuales que irán también al fondo por la igualdad para luchar contra la pobreza.

Pero eso también permitirá terminar con las coimas, las comisiones y la colusión entre los que compran y los que venden. Hago un llamado a todas las autoridades, a los elegidos por el pueblo, a los funcionarios, a los profesionales y empleados del Estado. Nuestro deber es servir. No somos empleados de un capitalista privado que se apropia de nuestra plusvalía, como la doctrina señalaba, nosotros somos servidores del pueblo que paga con su esfuerzo nuestros sueldos, el pueblo no es un capitalista al que hay que arrancar más salarios y condiciones de trabajo, no nos confundamos. Al tener un trabajo pagado por el pueblo ya tenemos un privilegio. Millones de peruanos no tienen ni empleo, ni CAFAE, ni estabilidad en el cargo ni agua, ni luz pero pagan con sus impuestos nuestros salarios y los bienes que utilizamos. No seamos una carga mayor para el pueblo productivo y pobre del país y mucho menos para los 13 millones de peruanos pobres”. (Los subrayados son míos)

Vistos en el contexto más amplio de la distancia entre la promesa y la realidad, el exceso grosero en los gastos en publicidad estatal termina siendo un pecadillo venial.

martes, 22 de junio de 2010

LA HORA DE LOS ELECTORES/ Juan Briceño Pomar

Cada 4 ó 5 años celebramos “fiestas democráticas” en la que los electores decidimos qué autoridades locales o nacionales nos gobernarán por un periodo.

Los ciudadanos nos hemos acostumbrado a que nuestra participación se limite a elegir a alguien luego de una corta pero intensa campaña electoral en la que los candidatos hacen gala de los fondos de que disponen o de su creatividad.

Por su parte la mayoría de partidos políticos consideran que sólo somos votos que sumados les permitirán acceder al poder y ejercerlo como mejor les parezca. Ni siquiera contemplan la posibilidad que queramos conocer, analizar y evaluar la calidad de los candidatos o el contenido de sus propuestas. Piensan en nosotros como “corderos” que seguiremos a la mayoría y votaremos por los más “guapos”, los que “mejor hablan”, los que “prometen más” o los que regalan “mejor propaganda”.

Esta ha sido hasta hoy la lógica de las elecciones y los roles que cumplíamos unos y otros.

Parece que una nueva corriente está alterando el statu quo y los ciudadanos empiezan a ser conscientes que pueden hacer algo para que los representantes y partidos que elijan se dediquen a servirlos y solucionar sus problemas. Pero ¿cómo es posible que esto suceda en otras latitudes y nosotros no hayamos sido capaces de avanzar en esa dirección?, ¿es que estamos condenados a elegir entre el “cáncer y el sida” como alguna vez se dijo?

A riesgo de simplificar la explicación de un fenómeno tremendamente complejo diré que dos factores han resultado decisivos para que se produzca: de un lado un mayor interés de los ciudadanos por participar en la vida pública y, de otro lado, la presión de los medios de comunicación social sobre los partidos políticos y sus candidatos para que presenten propuestas concretas para solucionar problemas concretos.

En menos de un año tenemos dos oportunidades –no una sino dos- de subirnos a este nuevo carro de la modernidad y el buen gobierno. Las elecciones locales de octubre 2010 y las presidenciales de abril 2011.

Los peruanos consideramos que los tres principales problemas del país son crisis económica-pobreza 28%, delincuencia-inseguridad 23% y desempleo 21%. En el caso específico de Lima los principales problemas percibidos son delincuencia-inseguridad 28%, crisis económica-pobreza 22% y desempleo 17% (Datum, Estudio de Opinión Pública a Nivel Nacional, abril 2010). Estas cifras, con ligeras diferencias, son las mismas que diversas encuestadoras han publicado el último año y por lo tanto estos problemas, al lado de signos preocupantes de corrupción, son los temas sobre los que se deben centrar las campañas electorales y los ciudadanos tenemos la obligación de exigir a quienes pretenden representarnos que nos presenten sus propuestas.

Ha llegado el momento que el protagonismo lo asuma quien en realidad debe ser el centro de todo afán de quienes pretenden gobernarnos: el ciudadano y sus problemas.

El proceso más cercano es para elegir presidentes regionales y alcaldes provinciales y distritales. Estamos hablando de una elección vecinal muy cercana al ciudadano. En ella debemos exigir que los candidatos se dejen de declaraciones grandilocuentes, pomposas y generales y nos digan que van a hacer con los problemas que vivimos día a día.

En el caso de la inseguridad ciudadana tengamos en cuenta algunos aspectos básicos que debemos exigir a los candidatos para evitar que nos vendan “gato por liebre”:

ü  La coordinación y la responsabilidad de las acciones locales que se ejecuten para solucionar los problemas de inseguridad están a cargo de los Presidentes Regionales y los Alcaldes. Por mucho que nos digan que “eso es asunto de la policía”, la ley del sistema nacional de seguridad ciudadana les asigna esa misión.

ü  El delito, sobre todo la pequeña criminalidad que es la que nos afecta directamente, no va a desaparecer. Podemos llegar a  controlarlo pero ni siquiera las sociedades más avanzadas han logrado erradicarlo completamente. El que nos diga que va a terminar con la delincuencia nos miente.

ü  No existen “soluciones mágicas” para la inseguridad. Es un problema con muchas causas y por lo tanto tiene múltiples soluciones. Sólo con una visión integral del tema y la ejecución de acciones de corto, medio y largo plazo lograremos controlarlo.

ü  Esta probado que las políticas de “mano dura” no han logrado solucionar el problema, por el contrario allí donde se aplicaron lo agravaron elevándose los índices de violencia y criminalidad.

ü  A los vecinos no nos importa tanto el gran narcotráfico sino el micro comercio que se produce en la esquina de nuestras casas y pone en riesgo a nuestros hijos cuando regresan del colegio o la universidad. Nos importa que nos roben nuestros celulares, carteras, accesorios de vehículos o viviendas. Las soluciones que nos propongan deben ser para esos problemas y no para otros.

Si todos exigimos que se nos hable de lo que en realidad nos importa y afecta, y no de lo que los candidatos quieran hablar; si todos reclamamos que los que quieran nuestro voto nos propongan soluciones que nos parezcan realistas y aplicables y no mentiras descaradas; si valoramos a los candidatos no porque pertenezcan a tal o cual partido o porque sean más o menos agradables sino por la calidad de sus propuestas y el equipo que lo acompaña; habremos dado un paso adelante en mejorar el futuro de nuestras localidades, nos haremos respetar como electores y luego podremos vigilar que los elegidos cumplan sus ofrecimientos y si no lo hacen utilizar los mecanismos que la ley nos otorga para removerlos de sus cargos.      

LLANTA DE PRENSA/ Mirko Lauer, Fernando Rospigliosi


I. ¿Más Castañeda o menos Castañeda?







II. Tema gaseoso






III. ¿Cuán dura es la Roca?

martes, 15 de junio de 2010

LLANTA DE PRENSA/ Augusto Álvarez Rodrich, Mirko Lauer, Fernando Rospigliosi


¿Existe la campaña municipal?





Todos con cadena perpetua





Doe Run: Ente la espada y la pared

miércoles, 9 de junio de 2010

lunes, 7 de junio de 2010

HUEVOS DE ESTURIÓN / Uso excesivo de la fuerza / Fernando Rospigliosi

No sólo los enemigos de Israel han criticado el bárbaro incidente del buque Mavi Mármara, en el que perdieron la vida nueve personas la semana pasada. El gobierno de Benjamín Netanyahu y Avigdor Lieberman ha sido duramente vapuleado en su país por el torpe y brutal operativo.


Incluso militares retirados han censurado la incursión en el barco turco:

“No estamos de acuerdo con el argumento de que hubo un error en la información de inteligencia... y no aceptamos los argumentos de que hubo malas relaciones públicas. Creemos que el plan estaba destinado al fracaso desde el comienzo”, dice un comunicado de diez marinos israelíes retirados. (La República, 7.6.10).

La ex canciller de ese país Tzipi Livni, líder de la oposición, presentó una moción de censura contra el gobierno de Netanyahu. Perdió en la votación de hoy lunes 7, pero es una muestra de lo dividido que ha quedado el país a consecuencia de la sangrienta acción.

Israel tiene derecho a revisar los envíos de “ayuda humanitaria” a Gaza. De hecho, cada mes entran miles de toneladas por vía terrestre. En varias oportunidades se han descubierto armas de todo tipo camufladas en la “ayuda humanitaria” que recibe el grupo terrorista Hamas, que gobierna esa región.

Sería necio negarle a Israel la posibilidad de controlar esos envíos y permitir que Irán y otros les proporcionen a los terroristas armas para que Hamas ataque a la población civil israelí, como lo ha venido haciendo por años.

Pero impedir que la flotilla que encabezaba el Mavi Mármara llegue a Gaza disparándole a los activistas desarmados es un gravísimo error.

La “armas” que ha presentado el gobierno israelí como prueba de la agresión de los activistas son fierros, hondas, herramientas de carpintería, etc. Nada que justifique la matanza.

Es verdad que los activistas del Mavi Mármara eran provocadores, pero hay maneras de enfrentarlos sin causar una matanza. Los israelíes, que durante décadas han combatido no sólo guerras y grupos terroristas, sino manifestaciones de protesta, saben como hacerlo sin necesidad de disparar.

Es como lo que está ocurriendo en el Perú bajo Alan García: un disturbio menor en el mercado de Piura, la policía dispara, cinco muertos. Un bloqueo de mineros informales en Chala, la policía dispara, seis muertos.

Eso se llama uso excesivo y descontrolado de la fuerza.

Existen armas no letales para enfrentar cierto tipo de manifestaciones. Los israelíes no sólo las tienen sino que las fabrican y saben usarlas.

El asunto es que el gobierno ultraderechista de Netanyahu y Lieberman muestra un completo desprecio por la vida y la integridad de las personas.

Las consecuencias de esta acción han perjudicado enormemente a Israel. Los extremistas islámicos turcos están aprovechando el incidente tratando de provocar una ruptura con Israel. Probablemente no lo consigan, pero de hecho las relaciones se han enfriado muchísimo.

Turquía era el país de mayoría islámica con el que Israel mantenía buenas relaciones… hasta ahora. Han perdido un aliado muy importante, por lo menos momentáneamente.

Netanyahu, que se encontraba en Canadá, tuvo que suspender su entrevista con el presidente estadounidense Barack Obama. Aunque los Estados Unidos siguen respaldando a Israel, la administración Obama es mucho menos complaciente que la anterior.

Y en todo el mundo los enemigos de Israel han aprovechado la ocasión para reiterar su odio a los judíos.

En suma, una acción equivocada y contraproducente de un gobierno descaminado. Los peores temores acerca de la alianza Netanyahu Lieberman se están confirmando.

viernes, 4 de junio de 2010

¿SE PUEDE CAER MÁS BAJO?/ Carlos Basombrío Iglesias

Confieso que cada vez me cuesta más escribir sobre la política peruana. Los niveles de deterioro deprimen y casi sólo hay para dar cuenta de corrupción, maniobras políticas, clientelismo, transfuguismos y todos los males imaginables.  Nada alentador, tampoco, se ve en el horizonte de mediano plazo.

Pero aún en ese escenario deprimente, lo ocurrido ayer en el Congreso sobresale, en el sentido de lo descarado y explícito. Como sabemos hace meses de meses que estamos sin dos magistrados en el Tribunal Constitucional y que después de un proceso de selección en el Congreso, que al parecer fue bastante razonable, quedaron los dos candidatos más potables entre los que se habían presentado. ¿Un proceso serio en el Congreso? Pues eso no podía quedar impune.

Desde hace meses el presidente de esa Comisión de selección Falla La Madrid, aprista dicho sea de paso, intenta que los nombren en el pleno. Se necesitan 80 votos y sus propios compañeros lo bloquean sistemáticamente. Había que dejar claro que ellos no estaban avalando una actuación como la de Falla la Madrid. (Faltaba más, no vaya a ser que tal tipo de ejemplo cunda y se repitan casos así dentro del partido).
Ayer sucedió de nuevo. Esta vez se estaba al filo y habían conseguido los 80 votos necesarios. El APRA no quiere a esos potenciales magistrados porque textualmente: “no les dan confianza política”. Es decir no les importa evaluar si son competentes y honestos, sino lo que importa  es que podrían no ser útiles a sus intereses como partido. Lo que más me impresiona no es que actúen así, sino el que ya es que ya no les importe decirlo públicamente.

Bueno como las cosas estaban a punto de lograrse agarraron a dos congresistas de Solidaridad Nacional, Morales y Menchola, y de delante de todo el mundo les ofrecieron algo (uno puede suponer que vinculado a las investigaciones por Comunicore o el “Lentopolitano” que hay en el Congreso) y estos se fueron del hemiciclo para no votar. Se consiguieron entonces sólo 78 votos y los apristas se salieron una vez más con la suya.

Reitero, no me impresiona la inmoralidad en la política peruana;  a estas alturas eso es ya un dato consistente de la realidad. Lo que me llama la atención es que ya no hay el más mínimo esfuerzo por disimular y/o justificar los sucios enjuagues que la dominan.  

miércoles, 2 de junio de 2010

HUEVOS DE ESTURIÓN / Perú, primer productor de cocaína / Fernando Rospigliosi

Según el jefe de la policía colombiana, Oscar Naranjo, el Perú ya superó a Colombia en producción de cocaína, 380 toneladas al año frente a 295 de nuestros vecinos.


El Perú ya se había convertido en el primer exportador de cocaína, como se dijo en esta columna. (“Perú primer exportador de cocaína en el mundo”, 1.7.09)

Según Naranjo, Colombia producía 1,100 toneladas de cocaína en la década de 1990. Ahora, gracias a los esfuerzos de varios gobiernos, la producción se ha reducido a menos de la tercera parte.

Naranjo puso el dedo en la llaga: el “verdadero drama y el verdadero problema” de Perú es que sus autoridades sólo sacan del mercado al año 14 toneladas, mediante operaciones de decomiso. Mientras, resaltó Naranjo, las autoridades colombianas intervienen 203 toneladas, que es la cifra de 2008. Es decir, la policía colombiana decomisa 15 veces más cocaína que su par peruana.

Esta cifra “significa que nos hemos incautado de más del 50 por ciento de la droga que produce Colombia, versus unos índices muy bajos de incautación en otros países”. Una cachetada para sus colegas peruanos.

Algunos críticos de la llamada guerra contra las drogas sostienen que esta es un fracaso porque el narcotráfico sigue existiendo. Esa es una falacia. Es imposible acabar con el narcotráfico. Pero la situación se puede cambiar radicalmente como ha ocurrido en Colombia.

En la década de 1990 los grandes cárteles de Medellín (Pablo Escobar y otros) y Cali (los Rodríguez Orejuela y otros) controlaban departamentos enteros y desataron una ola de violencia brutal que convirtió al país en uno de los más inseguros del mundo.

Poco después se sumaron las FARC, que resucitaron gracias a su completo involucramiento en el narcotráfico y crearon un ejército de 15,000 efectivos, bien armados y equipados.

Hoy día eso ha cambiado radicalmente. La violencia ha disminuido sensiblemente, Colombia es mucho más segura que antes, los grandes cárteles han desaparecido y las FARC están reducidas a su mínima expresión.

El narcotráfico sigue existiendo, pero son bandas más pequeñas, con perfil más bajo y ejercen menos violencia.

Eso es un triunfo.

El objetivo no es acabar con el narcotráfico. Eso es imposible a menos que se despenalicen las drogas, como ha propuesto Mario Vargas Llosa y otras personas. El objetivo es contenerlo y reducirlo, como lo está logrando Colombia.

En el Perú seguimos el camino inverso. El narcotráfico está creciendo sin control, generando más corrupción y violencia. Cuando se le quiera enfrentar en serio, la lucha va a ser muy dura y sangrienta. Mientras más se le deja prosperar, más difícil y violento será combatirlo.

martes, 1 de junio de 2010