Definitivamente estamos viviendo la maldición china: “ojala te toquen tiempos interesantes”. Yo diría fascinantes. Lo que se pretende ocultar aparece en la superficie, con todos los reflectores puestos.
Mientras que en Nueva York, el juez Denny Chin le aplica 150 años de condena, la máxima pena posible, a Bernard Madoff, el mayor estafador de la historia financiera, el público asistente en la sala irrumpe en aplausos, los medios de comunicación lo informan con alegría y el pueblo norteamericano celebra; aquí en Lima dos jueces, sobre los que no vale la pena acordarse de su nombre, sacan de la cárcel a Rómulo León, implicado en el escándalo de corrupción más grande de los últimos años. Todo hecho entre gallos y media noche, con miles de subterfugios legales, con la complicidad del poder judicial, del gobierno, y de la mayoría de medios de comunicación, con la mayor campaña de desinformación que he conocido, levantando un crimen pasional que no debió pasar de las páginas policiales, y que llegó a cientos de primeras planas, y de horas de prime time televisivos y radiales.
No podía ser más claro el contraste: un juez, un poder judicial, unos medios de comunicación, una clase política, que se conectan con la sed de justicia que están clamando los pueblos del mundo, luego de ser revelados los rostros, empresas, instituciones y circunstancias de la crisis financiera mundial; y otros jueces, otro poder judicial, otros medios de comunicación, otra clase política, aliados con la corrupción.
Tienen el poder, el dinero y los medios, pero van a ser derrotados. No se dan cuenta que estamos en medio de una revolución ética mundial, de la que el Perú no va a poder escapar, por más que se esfuercen algunos.
El gabinete que está
Bien lo de la "revolucióhn ética mundial." Hay que apurarla en el Perú, necesitamos que permée no solo la política, sino la empresa, los medios de comunicación y toda la sociedad. Para que no escuchemos en la calle "pobre chinito, habrá robado pero hizo obra". No es mayoritario felizmente pero es peligrosísimo. Me pregunto ¿A cuánta gente le ha indignado como a ti o a mi y otros que nos leemos en los blogs y columnas, la salida de Rómulo León por la puerta grande de San Jorge?
ResponderEliminarCon el APRA en el poder la corrupción se ha institucionalizado cual gangrena que arrasa con todos los tejidos orgánicos de nuestra sociedad. Es decir; “donde se pone el dedo salta la pus… lagrimas y sangre”. ¿Puede alguien, con mente lucida, discrepar sobre esta triste realidad?...
ResponderEliminar4'200,000% de inflación, dolares MUC, viajes semanales a Tocache y Uchiza, matanza en el Fronton, etc. etc. (hagamos un lapso y pidamos perdón por los errores de juventud...), compra de vehiculos, terremoto en Pisco y desaparición de presupuestos, faenón de petroaudios y el (a) El Gordo que todo lo sabe y maneja la mafia, matanza en Bagua, una rata a la calle... (son tantas cosas similares que la memoria queda corta)...
ResponderEliminarEsperaba algo diferente, en verdad, nuestro pueblo, de este reciclado expoliador de las arcas nacionales?
Habría que ser muy ingenuo para ello, y votar por el pésimamente llamado "mal menor" (asi fuera tapándose la nariz), ha sido y es lo peor que puede haberle pasado a nuestra Patria.
Me gustaría que nos dejemos ya de eufemismos como aquellos de "presidente fuera de su realidad" o como C. Hildebrandt grita "donde diablos estas, Dr. Saul Peña?" para utilizar las cuatro letras que definen a quien hemos elegido como presidente: loco. Y que no nos arrastre mas en su desvarío.
Un abrazo
Gracias Susana; yo veo varios signos de la insurgencia del tema ético, como la elección de Obama, la rebelión en USA cuando Bush quiso pagar el rescate financiero a los mismos ejecutivos responsables del desastre, a los funcionarios de las empresas financieras les dicen que pueden ir elegantes a su trabajo, en NY y en Londres, aparte de los miles de mails, blogs y comentarios. No sé si ya constituyen una revolución, pero bien podrían llegar a serlo.
ResponderEliminarEdgardo y Alfonso, desgraciadamente se confirma que Alan ni el APRA han cambiado mucho respecto de su primer gobierno. Además, está el tema de la fragilidad mental del gobernante, que debe ser considerado muy en serio.
Saludos
FV
Corrijo un error anterior: a los ejecutivos y funcionarios de las empresas financieras en NY y Londres les recomiendan NO ponerse ropa fina o elegante, para andar por la calle; de manero de no alimentar el repudio y rechazo de la población (esto salió en un número de The Economist).
ResponderEliminar