Samuel Abad, Carlos Basombrío, Francisco Belaunde Matossian, Jorge Bruce, Gustavo Carrión, Carlos Iván Degregori (+), Ramiro Escobar, Liuba Kogan, Nelson Manrique, Augusto Ortiz de Zevallos, Luis Pásara, Fernando Rospigliosi, Andrés Solari, Alfredo Stecher, León Trahtemberg, Javier Torres, Sandro Venturo, Celeste Viale, Fernando Villarán.
lunes, 12 de diciembre de 2011
Augusto Ortiz de Zevallos/ UNA SOLA COSTA VERDE Y NO SEIS PARCELAS
La Herradura estará ya recuperada para Navidad y será un regalo para Lima. Esa playa mítica a la que, cuando Leguía, se iba en un tren que explica el túnel. Porque tenía mucha más arena que las demás y porque su pequeña bahía le daba una sensación mágica de estar fuera de la ciudad. Y que entre los 50 y los 80 era la playa de todos.Y será el comienzo y el botón de muestra de recuperar toda la costa para toda la metrópoli. Porque la playa es un espacio para todos. Y porque en la elección municipal eso ya se plebiscitó. Que ese gran espacio no es uno para lotizarlo en algunos negocios, sino para destinarlo al encuentro, al deporte, a la cultura, la recreación, el bienestar, el respeto a la naturaleza y al paisaje. Todo el año, a todas horas.Lo cual, para cualquier analista inteligente y cualquier empresario despierto, produce importantes mejoras económicas: todo lo que está cerca vale más, todo lo que llega a ella se potencia. Y ya es así, por ejemplo, en San Miguel, donde todo lo que está en balcón o cerca es buscado. Y en Magdalena, San Isidro, Miraflores, Barranco y Chorrillos. Valor extendido, predial incrementado, licencias activadas, potencial para gastronomía, turismo, deportes, recreación y cultura.Por primera vez, desde cuando al hacerse el Zanjón, cuando Bedoya se llevó allí la tierra excavada y se generó así espacios ampliados, con la intuición certera del arquitecto Ernesto Aramburú Menchaca, será Lima Metropolitana la que invertirá en este espacio fundamental para la ciudad. Veinticinco soles de los impuestos de cada limeño servirán para que todos tengamos allí playa, espacio, cultura, disfrute y una mejor ciudadanía. Y esa oferta de espacio será una presencia relevante para cambiar los hábitos urbanos. Ya este verano habrá buses playeros, como alguna vez hubo y como tiene que haber de nuevo.Y durante el 2012 se consolidará toda la Costa Verde, con escaleras, rampas, ciclovías y conexiones con todas las avenidas que llegan al litoral y que hoy no llegan a nada: (Brasil, Sucre, Universitaria, Salaverry…). Cambiará esa noción equivocada de que la Costa Verde es una pista, que alguna vez pudo ser rápida, para entender que siendo una vía de borde, es antes que eso, un Paseo Marítimo.Que también habrá en las costas de Villa El Salvador, como inicio de un litoral extendido y valioso. Y ahora veremos que los malecones son para ver mar y no pistas, como deben ser las bancas y los espacios urbanos a crear allí, para que tengan gente. Y que no deben ser como algunas que allí están y que parecen plazas que se cayeron de arriba, porque no dialogan con el mar.Lima es la única capital de toda América del Sur frente al mar. La otra que lo fue: Rio, que sin duda lo disfruta y donde la costa es el emblema de la ciudad. Mientras que hasta hace poco Lima tiene, frente al mar, espaldas. Está Maranguita, está el Leoncio Prado, ya en el Callao. Estuvieron (y siguen) fábricas, talleres, invasiones, barrios duros cuyo frente eran las avenidas de atrás. El atrás es adelante y el adelante, atrás. Y quedan desagües y hábitos que suprimir, vertederos y tierras de nadie.A la metrópoli le corresponde cuidar, recuperar y concertar este bien de todos. No les podemos pedir a seis distritos que nos lo cuiden y sostengan para quienes venimos de 43 distritos. Sí, por cierto, se debe llevar adelante los planes concertadamente, con los seis distritos costeros, como se hace. El proyecto estructurador, aprobado por todos, que ya empezó y se hará durante el 2012, invertirá esos 25 soles por limeño. Es el primer presupuesto del que es responsable Susana Villarán, pues el anterior, éste que termina, lo dejó decidido la gestión de Luis Castañeda, y no había en él un sol de inversión en obras en la Costa Verde.Quizá porque se abre ese escenario prometedor, al que se sumará la inversión del Río Verde, y la consecuente recuperación del centro, que ya empezó con las plazuelas en proceso de ser recuperadas, aparecen extemporáneamente y con afanes de protagonismo algunos opositores.Lo son a que se lleve adelante el programa que ganó democráticamente y con debates explícitos en este tema, las elecciones, para seguir con la cantaleta y el cuento de que la Villarán no hace nada. Esos agoreros deben estar incómodos con el cambio de tendencia en las encuestas, donde los limeños aprueban mayoritariamente que se haga eso que se hace (corregir el caos del transporte, no transigir con ambulantes, recuperar el río, la costa y el centro). Y, si lo que se hace está bien, entonces, obviamente, quien lo lidera no está mal. Y la mejora de su aprobación ya viene, superadas las inercias debidas a esas etiquetas que la prensa chicha y cuasi chicha le regala todos los días en carátula y horarios estelares, como se hacía contra Andrade en los tiempos de Montesinos y Laura Bozzo.En todo caso, en la Costa Verde lo que ya comenzó lo aprobaron los seis distritos, que lo que pidieron es que se materialicen las obras.Ya empezaron.
Augusto Ortiz de Zevallos/ EN RESPUESTA
En La República, el sábado 10-12-11, el
arquitecto Cooper desarrolla reflexiones
muy suyas, que lo llevan tras largos prólogos,
a pretender que dos obras municipales fundamentales de la gestión de Susana Villarán, la Costa
Verde y la Vía Parque Rímac, deben
suspenderse. Hasta que haya esos
concursos de arquitectura que dice preferir y que, como sabemos los arquitectos, también
le gusta organizar, inventando paradigmas y jurados. Podría sonar bien. Frederick Cooper busca
así presentarse como verdaderamente representativo de la profesión arquitectónica,
la que, según su texto, está excluida o ignorada por la gestión de Susana
Villarán.
Como estoy aludido sin que se me nombre, y no es la primera vez, (cuando se recuperó los
colores de Lima, con Barrantes y cuando diseñé el Gran Parque de Lima, con
Andrade, movió firmas para sendas cartas de objeción, con falacias
parecidas), respondo.
El derrotero del artículo es meándrico, inexacto , y quisiera ser acumulativo. Empieza
Cooper, afirmando compungido desde su
pedestal:
“la
señora Susana Villarán, como ha sido usual(…)resultó elegida sin haber dado a
conocer aquel plan de gobierno cuya carencia longeva y perniciosa ha sumido a
nuestra capital en (…)inseguridad, ineficiencia y fealdad- en suma, en el
caos(…)”
.
Lo que es abiertamente falso. Sí hubo plan
y debate, incluyendo y exponiendo precisamente esos dos proyectos, para el
litoral y el río, como parte de ese
plan. En programas televisivos y hasta
en el mitin de cierre. Que Cooper no se haya enterado es un problema suyo. El
electorado sí supo. Y votó. Por esa Costa Verde y por ese Río Verde que ahora
se quiere impedir o enredar para mover revocatorias y quitar el piso a un
mandato legítimo. Cuando quienes Cooper
quería que ganen, perdieron. Esa vez y
las siguientes. Mi amiga Lourdes Flores , Kucksinsky y Keiko. Piña.
Dice también, sobre el equipo de Susana
Villarán, que
“hasta
donde se sepa, no figuran profesionales experimentados en planificación
urbana(…)”
Muchas gracias, pero hasta donde se sabe,
él ciertamente no es uno.
Y si no, que se nos explique (y que empiece
ante los Barranquinos), el lamentable fracaso, de aceptación y de
desfiguración, que el Museo que él diseñó
ha sido en Barranco, sin que nadie recuerde concurso, en suelo público. Desnaturalizando un parque que
era histórico, pintoresco y quizá ingenuo
pero preexistía y era parte de la identidad Barranquina, y que por ello
había sido declarado monumento, condición que antes él le retiró. Para poner allí esos prismas de
fierro que son citas literales a Mies Van der Rohe, para alojar el arte contemporáneo peruano. Convirtiendo todo lo demás en retiros o
espacios subordinados. Proyecto que se ha tenido que cambiar. No le sobra, pues,
legitimidad al objetor.
Y añade también Cooper, en su usual estilo, sobre
Susana Villarán
“ella
también se apresta a ejercer su gobierno adoptando proyectos de obra pública
que ni responden a sus iniciativas ni constituyen la esperada señal (...)el
emprendimiento de un plan integral que enrumbe la evolución de Lima hacia un
ordenamiento equilibrado y esperanzador(…). A buena entendedora, pocas palabras.
Llámeme.
Y luego, contraviniendo lo que todos saben,
y él también, como ya veremos, dice que
“intempestivamente
se anuncia la remodelación de un sector de Chorrillos(…) y se da a conocer la
pronta realización de trabajos a efectuarse tanto en la Costa Verde como en el
cauce del río Rímac”(…) Ambas propuestas, además de no formar parte de un plan
integral orgánico ni técnicamente sustentado(…)tendrían que haber sido materia
de un concurso(…)
Y suma a esas falsedades (pues lo que llama
intempestivo lo sabrían todos menos él) , algunas admoniciones:
“relegar
esos valores al desván de la retórica impresa y vacua(…) delata una lamentable
coincidencia con el talante improvisado y populista de la mayoría de sus
antecesores(…)
Y luego, dado el sermón, termina ofreciendo el regreso al buen camino
“ojalá
que la gestión de la señora Susana Villarán represente un cambio de rumbo
sustancial respecto a la necesidad de contar con un plan integral para el
desarrollo de Lima y que abandone la nociva y no democrática costumbre (…). Es decir, Llámeme, bis.
Las citas son literales, y el artículo debe
estar en internet, así que respondo a algo que es público.
Falsea hechos decir que son “intempestivos”
estos dos proyectos y obras. La Costa Verde fue debatida y explicada en
público, hace dos años y la maqueta y planos del proyecto están exhibidos en
los portales físicos de la Municipalidad desde principios de este año. Si él no
lo supiera, eso vuelve a ser su problema. Pero lo grave es que sí lo sabe. Hace
rato.
El
proyecto y expediente de la Costa Verde, lo conoce el arquitecto Cooper, porque
se lo expliqué en presencia del alcalde anterior Luis Castañeda, quien me lo
encargó, como siempre he dicho, después de un debate público (ver mis artículos
en Perú 21, que están en Internet), para
corregir errores a los que lo habían llevado otros. Y Luis Castañeda invitó a Cooper,
a pedido suyo. Y él acudió, acompañado
con varios arquitectos profesores de la universidad en que es decano (recuerdo
a los arquitectos Figari, Ledgard y Rodríguez). Todos opinaron a favor y no se
conoce texto en contra, ni suyo ni
de los valiosos colegas a quienes
llevó. Lo intempestivo, entonces, tiene
dos años.
Y lo del “talante improvisado de sus
antecesores” no lo decía entonces. Cuando cultivaba buenos términos en
ese palacio municipal. Y en el de al lado. Y hay más aún. Cuando Cooper organizó y monitoreó el concurso para el Lugar de la Memoria me
pidió y recibió ese expediente que ahora afirma desconocer, y que se necesitaba
porque allí se definía la vialidad y las pautas físicas del entorno. Y sin duda
sabe también que una vez que su jurado falló el ganador, ayudamos a solucionar
con pautas urbanísticas precisas, aprobaciones y licencias. Nada hay, pues, de
intempestivo, salvo su amnesia selectiva.
El expediente de la obra que se hace está
listo, desde que él lo conoció. Tiene SNIP desde el 2010. Y ahora
se convierte en obra. Y ya lo he explicado varias veces invitado en la
Facultad de Arquitectura que él controla. Y no ha habido objeciones porque además, no es
uno de esos ejercicios de figuración, gasto y protagonismo, con estrellas
internacionales, que alienta, sino uno
de respuestas de sobriedad y pertinencia. El proyecto está expuesto en el
Pasaje Santa Rosa.
Y también se falsea, quizás por
desinformación, al hablar de las obras que se harán en el río.
Ocurre, arquitecto Cooper, que la gestión
anterior había dejado firmado el proyecto de la llamada Línea Amarilla, a lo
que usted que se sepa no se opuso. Ocurre también, que el proyecto del Río
Verde lo expusimos y debatimos
extensamente en la campaña electoral. Y que se constató al comenzar la
gestión de Susana Villarán, que no eran compatibles, porque el proyecto que se había
dejado acordado era solamente de vialidad y no proponía una recuperación del
centro y el río. Lo que se consiguió fue que la misma empresa brasileña, OAS,
quien hará las obras y el expediente técnico, porque ya tiene la buena pro que obtuvo en un
concurso de inversión público-privada,
acepte ajustar el proyecto para que sea uno de desarrollo y no solamente
de vialidad. Y donde el centro ahora se va a recuperar, así como todos los
distritos que dan frente al río: Cercado, Rímac, San Martín de Porres,
Agustino, San Juan de Lurigancho. Y probablemente, aguas arriba, Ate, Santa
Anita, Huachipa y ojalá que hasta Chosica y Chaclacayo.
Se confunde, quizá esta vez por
desinformación e inexperiencia urbanística, la infraestructura y el
ordenamiento territorial y vial, con el supuesto de que el proyecto vaya a ser
una arquitectura definitiva a lo largo de kilómetros. Y si el enfadado comentarista
se acerca a la Plaza de Armas o pregunta podrá constatar que hay abundantes escenarios para inversión e
iniciativa privada, y por tanto para nueva arquitectura, que el proyecto genera
y que no había en Línea Amarilla. Sería bueno que sepa además que el proyecto
se ha presentado ya en cuatro foros sobre posibilidades de inversión privada.
Por último, aunque seguramente también por
desconocimiento, se pretende y afirma, en una columna sobre ciudad y
arquitectura, que no hay en proceso un plan integral para el desarrollo de
Lima. Tampoco es verdad. Pero dejo este tema para otra nota.
Augusto Ortiz de Zevallos/ STEVE JOBS, EL ÚLTIMO RENACENTISTA
Muerto joven a los 56, en un mutis tan elegante
como lamentable, Steve Jobs marca nuestra época y le ofrece algo parecido a lo
que hizo el Renacimiento, y a lo que antes hizo Grecia: acercar arte e
inteligencia. Arte que cambia
cosmovisiones. Convertir al ser humano en la medida de todas las cosas,
empoderarlo y reemplazar sus miedos por su libertad. Y entonces democratizar la
cultura y dar herramientas para que prevalezca la creatividad sobre la
repetición.
Su pugna con Bill Gates fue la del creador contra
el negociante, entender que esa formidable herramienta que se necesita (los
españoles la llaman mejor que nosotros: ordenador, algo que permite organizar;
mientras nosotros le decimos banalmente computadora, como los gringos: algo
cuantitativo) debe ser algo que nos
permita expresarnos y proponer y no solamente eso que fideliza clientes y
genera cautivos. Jobs creó herramientas de libertad, Gates, de consumo. En esa pugna dialéctica
claramente el romántico era Steve Jobs.
Esa generación californiana, en territorio
librepensador y hippie, a quienes el Estado de Nixon los había obligado contra
su conciencia a ir jóvenes a Vietnam, consiguió vengarse años más tarde de ese
Estado impositivo y mediocre. Los ordenadores fueron un gran acto de rebeldía,
como es todo el arte según Camus. Permitieron y permiten tener, primero en la
oficina, luego en casa y ahora en la mano, toda la información que necesito y
toda la capacidad de comunicación y persuasión que quiero. Con lo cual el
Estado policiaco resultó impotente. Y poder así organizar futuro, ese poder que
antes lo tenían el ejército o el aparato político.
Esa revolución es enorme. Y son esos ordenadores y
smartphones que impulsó Jobs a quienes debe Estados Unidos que haya ganado
Obama. Y, antes, en España, que perdiese Aznar, desnudadas sus mentiras. Y
también ahora que los Indignados se multipliquen de ciudad en ciudad y país en
país y hayan caído dictaduras en toda Africa del Norte. Y que le quede poco
tiempo a los regímenes dictatoriales centroamericanos, porque ya las puertas de
la información no se pueden cerrar.
Pero además de multiplicar información las
hermosas herramientas de Steve Jobs, que son obras de arte, poéticas y
metafóricas, han dado la base para una
estética nueva, en la imagen y hasta en la palabra. El estilo de nuestro
tiempo, en artes y pensamiento, se nutre de que los ordenadores sean como son.
Y es el ser humano quien, teniéndolos, adquiere autonomías y libertades que
antes se impedían y temían. Humanismo, entonces.
Los renacentistas, al inventar la perspectiva,
buscaban que todo se ordene desde el ojo y que en el centro de ese espacio
representado ahora esté la persona y ya no Dios. Antes, el ser humano veía
desde abajo a un Dios inalcanzable e omnipotente de quien se reverenciaba esa
omnipotencia. El Renacimiento al ordenar el espacio desde el ojo, prevaleciendo
la horizontal y ya no esa vertical subordinada y temerosa desde abajo,
convirtió al observador en sujeto. Cada ser humano escogía su mirada y su
entidad. Y ahora ve todo el espacio que le importa. El mundo cambió cuando se
pasó de los miedos a la lucidez y a la razón.
Si en el Renacimiento lo que importó era ver
libremente desde nuestros ojos y poder ser individuos, y si, para ello se
inventó la perspectiva, midiendo y
organizando el espacio perceptible, lo
que se hizo en el Humanismo fue celebrar la especificidad de cada persona.
Y ahora la libertad puede estar en cada mano. Y
cada vida ya no se rige por fatalidades sino que puede escogerse. El ordenador
Apple y las invenciones sucesivas de la familia de la manzana nos dan poder y
nos abren un futuro que dependerá de lo que cada uno quiera y haga.
Steve Jobs, que te vaya bien allá arriba, y si hay
Dios (o dioses, que sería mejor, como cuando los griegos) convéncelos de que
nos merecemos más que esto de andar con miedos. Y saludos a Picasso.
Gracias.
viernes, 2 de diciembre de 2011
LA CRISIS ESTÁ GALOPANDO/ Alfredo Stecher
No solo cada semana, sino casi cada día nos encontramos con
datos y pronósticos pesimistas. Para retomar la imagen hípica: la crisis ya
está galopando. Y lo está haciendo como si la economía estuviera en un tobogán
con trechos de diferentes ángulos de inclinación - algunos relativamente
horizontales, cada vez menores y menos frecuentes. En estos momentos estamos en
uno de esos trechos, caracterizados por alzas en las bolsas mundiales (y por
enormes ganancias de muchos grandes especuladores). Dudo que dure más de una
semana. Pero parece que esos remansos de esperanza de solución y tranquilidad
me incitan a insistir en el tema.
Poco a poco, a ritmo creciente, la mayoría de los
economistas y políticos están asumiendo la crisis como una realidad o como una
amenaza creciente e inminente. Cada vez se lee y escucha más la figura de la
economía al borde del precipicio y el augurio de un impacto aún mayor que el de
su antecesora – o inicio – de 2008/09.
No quiero asustar. Pero puede ser útil tomar algunos
ejemplos de expresiones muy recientes, inimaginables hasta hace poco, cuando
había que recurrir a Krugman o Roubini para encontrar una preocupación
parecida.
Dos destacados y sensatos economistas chilenos (vale la pena
destacarlo como una excepción en nuestra profesión), Sebastián Edwards: La
probabilidad de una hecatombe peor que
la del año 2008 es altísima; y Eduardo Engel: Que el precio de la libra de cobre caiga a un dólar (de más
de tres actualmente) es un escenario improbable pero lejos de imposible (y
sería catastrófico para el Perú y Chile).
Un editor de Financial Times: La eurozona tiene solo días
para evitar el colapso y La
situación me recuerda las últimas horas del Titanic (una figura usada frecuentemente por periodistas
especializados).
Un ejecutivo de un fondo de alto riesgo: Se está jugando con
fuego.
Un analista inglés, Timothy Garton Ash, sobre la política de
Alemania: Solo tiene razón en un 70%, un porcentaje que en un mundo de pánico
en los mercados puede convertirse de pronto en un 100% de error.
El ministro de Relaciones Exteriores de Polonia, Radoslaw
Sikorski: Solo Alemania puede salvar a la zona euro y la Unión Europea de una
crisis de proporciones apocalípticas.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económico (OCDE) ha señalado hace pocos días en su informe que a menos que se
adopte medidas contundentes para impedir la crisis en la eurozona, las
consecuencias serán devastadoras
para la economía mundial.
Y hasta un alto asesor del Gobierno alemán: Serios riesgos
de un desastre real.
El viceprimer ministro chino, Wang Quishan: La recesión
económica global causada por la crisis financiera internacional será crónica.
Wang ha planteado la necesidad para la economía china de
centrarse en su propio mercado. Esa noticia es particularmente alarmante, por
más que solo remache lo que ya sabíamos, porque proviene de la principal
locomotora de la economía mundial. Un pésimo augurio.
La crisis griega ha resultado ser solo la punta de un enorme
iceberg compuesto por las principales economías europeas. Hasta hace unos días
se decía, “excepto la alemana – y algunas más”, pero la reciente dificultad del
Banco Central de Alemania para colocar nuevos bonos a largo plazo podría indicar
que no será la excepción, a pesar de que luego los bonos alemanes han seguido
siendo comprados a tasas bajísimas, solo ligeramente superiores a las
norteamericanas. Finalmente la crisis es del euro, también la moneda de
Alemania.
Ante las esperanzas o desesperanzas de muchas personas por entender
la calidad y el poder de las principales economías e instituciones económicas
mundiales en manos de tecnócratas o de políticos que se guían por éstos, Paul
Krugman, a mi juicio el más lúcido economista, ha dicho hace poco que en su
mayoría son más bien ideólogos románticos que no quieren ver en la realidad lo
que no encaja con su ideología. Y tiene mucha razón. Destacan en esto los
economistas alemanes de mayor peso. Él señala que, a la vez que espera que los
europeos cambien de curso a tiempo, considera más probable que lo sigan camino
a la ruina.
En resumen, la crisis económica actual, que va llevando al
mundo a su segunda Gran Depresión, es el desinfle progresivo y progresivamente
más acelerado de un conjunto de burbujas generado por un gran esquema Ponzi de
apalancamiento excesivo de los instrumentos financieros cada vez más
desconectados de su base material en la economía real. Ese desinfle es
inevitable y son inevitables la recesión, la destrucción de un porcentaje significativo
de la riqueza actual y un deterioro de la calidad de vida de la inmensa mayoría
de las personas vía aumento de la desocupación y reducción de remuneraciones,
entre otros. Lo que es evitable es un daño extremo a la economía real y a las
sociedades humanas causado por políticas equivocadas frente al desempeño de los
mercados.
Hasta ahora nos encaminamos hacia un escenario dantesco, de
colapso del euro y de recesión mundial aguda, porque las autoridades políticas
andan rengueando detrás de los acontecimientos económicos, y las autoridades
económicas no pueden – algunas tampoco quieren – adoptar medidas que podrían
eventualmente posibilitar un aterrizaje menos dramático de la economía.
La Unión Europea necesitaría desplegar todos los mecanismos políticos
posibles para evitar una profundización catastrófica de la crisis, y no hay
seguridad de que lo haga – a tiempo. A medida que la crisis se prolonga se va
convirtiendo de financiera en crisis de solvencia. Los intereses récord que han
estado pagando Italia y España, cinco o seis veces más altos que los más altos
que paga Alemania, son insostenibles en tanto contribuyen a aumentar las deudas
ya demasiado altas. Ya Francia, Bélgica y Austria, que parecían inmunes, han
visto aumentar significativamente sus primas de riesgo (respecto de las tasas
de Alemania). Y el hundimiento de su economía está poniendo en aprietos al
gobierno británico y cuestionando su política de ajuste fiscal. La
desprestigiada pero aún poderosa agencia de calificación crediticia Moody’s amenazó
a modo de ultimátum con una rebaja generalizada de las notas de solvencia en la
Unión Europea si no adoptan medidas para estabilizar los mercados hasta inicios
de 2012.
Las necesidades de recursos para salvar a los países en
peligro de insolvencia - incluyen ahora a Italia y España, la tercera y cuarta
economía de la zona euro, y pueden arrastrar a Francia, la segunda economía en
tamaño - son de un orden muy superior a la capacidad de las entidades
financieras y políticas que tendrían que rescatarlos. El Fondo Europeo de
Estabilidad Financiera no logra superar el orden de las centenas de miles de
millones de euros. Los líderes ya han reconocido que necesitarán el apoyo del
Banco Central Europeo y del Fondo Monetario Internacional, pero también los
recursos de éstos resultan limitados frente a la magnitud potencial del
salvataje necesario. Hay un enorme riesgo de colapso del sistema financiero –
lo que la caída de Lehman&Brothers en 2008 desencadenó ha mostrado lo
terrible que puede ser eso. Y esta vez sería peor.
Ante el derrumbe progresivo de un cerro por una falla
geológica profunda no hay fuerza que lo pueda detener, pero sí puede adoptarse medidas
para minimizar los daños.
Yo no pierdo la esperanza – y la creo realista - de que el
liderazgo político europeo logre evitar lo peor, de modo que la inevitable
depresión mundial no alcance los niveles dantescos que ahora parecen probables.
Ángela Merkel, de quien al parecer todo depende, está mal asesorada y es terca,
pero ha demostrado ser capaz de cambiar de posición ante evidencias de su
equivocación. Es posible – y deseable - que la Unión Europea, después de ser
zamaqueada violentamente y resultar seriamente golpeada en este proceso, se vea
a la larga fortalecida.
jueves, 20 de octubre de 2011
SI, NO, SI, NO…
Las dudas los están matando. ¿Respaldamos a Chehade ó lo dejamos caer? Pasan los días y las evidencias de que Chehade mintió aumentan. Además de las contradicciones del “amigo que participó en la reunión por casualidad”, en que reconoce que Andahuasi sí fue parte de las conversaciones, hay un testigo que vio al hermano del Vicepresidente y al “amigo” en el Potao, hablando con el General Arteta, ratificando así su versión de los acontecimientos.
La “crisis Chehade” sigue llenando las primeras planas y el gobierno comienza a mostrar más preocupación. Marisol Espinoza, su colega Vicepresidente, cambió su discurso de apoyo total y ahora habla de investigar. Nadine Heredia, quien cada vez parece más la voz cantante en la pareja presidencial, dijo por tweeter: “tan difícil es caminar derecho??!!”, en inequívoca condena a Chehade. Salomón Lerner ha respaldado tibiamente a Chehade mientras duran las investigaciones, luego de lo cual tomarían una decisión definitiva.
¿Y Ollanta Humala? Silencio absoluto,
Me da la impresión que todavía creen que el tema se va a disolver sólo con el tiempo. Eso es un error político, el caso Chehade va para peor; y si no rompen con el cuestionado personaje, sus conductas pasarán factura al régimen en su conjunto.
miércoles, 19 de octubre de 2011
¿PERDERÁ LA VIRGINIDAD?/ Carlos Basombrío Iglesias
Por un lado las versiones del Vicepresidente sobre los motivos de la reunión con los generales de la Policía son bastante inconsistentes, casi cantinflescas. Por otro porque nuevas revelaciones van poniendo en cuestión su versión. Su amigo –aquel que (dice Chehade) se encontró en la puerta y le dijo “oye si no tienes nada mejor que hacer, vente con nosotros a la reunión con los generales”- ha tenido que reconocer que el tema Andahuasi si fue conversado.
Creo, además, que es altamente probable que nuevas revelaciones terminen de hundirlo.
El punto medular es como va a reaccionar Ollanta Humala. Según Chehade tiene su pleno respaldo. Sin embargo la palabra de Chehade no está precisamente en alto concepto en los últimos días.
Lo concreto es que Ollanta Humala está mudo (igual que con el escándalo Alexis). Todo parece que está viendo como viene la mano, midiendo la temperatura política. Es que Chehade es para él más que cualquier Vicepresidente. Es su abogado personal, aquel que lo libró del “caso Madre Mía”, con todas las cosas que se denuncian, ocurrieron en ese proceso.
Creo que la gran mayoría de la opinión pública discrepa con la complicidad de voces menores del oficialismo con Chehade: “si, muy convincente su versión” “ya explicó todo”, etc. Estoy seguro que la gran mayoría sabe que algo muy oscuro motivó esa reunión y que el General Arteta, conocido por su seriedad personal y profesional, no tendría cómo y para qué inventar esa historia.
¿Qué hará Ollanta Humala?
Es un momento de definición. Si actúa correctamente y toma toda la distancia con respecto a su Vicepresidente que la gravedad de los hechos amerita, su imagen de moralizador se habrá consolidado.
Si, como muchos tememos, termina avalando o pasando por agua tibia lo sucedido, habrá perdido la virginidad política entre sus electores. Las expresiones “todos son iguales”, “llegan al poder y traicionan” serán cada vez más frecuentes.
Sabemos muy bien las consecuencias políticas que esto conlleva.
martes, 18 de octubre de 2011
EL SIGNIFICADO DEL “AGUA” PARA LOS NATIVOS ANDINOS Y PARA LOS PROFESIONALES MODERNOS/ Por León Trahtemberg
En reciente viaje a Andahuaylas (Apurímac) invitado por la Cooperativa San Pedro para dar unas conferencias, se me acercó el sociólogo rural Alfredo Mendoza Bellido para entregarme un breve libro en formato horizontal escrito junto con Nancy Campos Pérez titulado "Crianza del agua y tradiciones ambientales en Andahuaylas: prácticas campesinas para contrarrestar el cambio climático y fortalecer la soberanía alimentaria".
A la hora de la cena empecé a hojear el libro y me quedé prendido de la página 5 en la que desarrolla el concepto andino de "madre agua" versus el concepto occidental del "recurso agua". Transcribo los tres primeros párrafos de la página para que se entienda qué fue lo que llamó mi atención. Dice así.
"Crianza de la Madre Agua o Yaku Mama. En las culturas, dentro de cada palabra, está el concepto y el contenido. Todo depende de la cosmovisión con la que se piense. Así, "Recurso Agua" (concepto occidental) difiere del concepto andino "Yaku Mama" (Madre Agua). De otra parte, hay una correspondencia entre la lengua y el lugar donde se vive. Es así que "Puquio Mama Waqaychay" en quechua andahuaylino significa ritualidad, protección y amparo al ojo de manante y humedad circundante.
En la epistemología indígena, la forma andina de conocer, pensar, hablar y hacer es sintiendo que todo cuanto existe son madres, vivas, amadas y tienen ánima o espíritu. El agua es Yaku Mama (Madre Agua); la tierra es Pacha Mama (Madre Tierra); el manante es Puqio Mama (Madre Puquio); la coca, Mama Coca (Madre Coca); la Puna es Sallqa Mama (Madre Puna); el maíz es Sara Mama (Madre Maíz). En nuestras averiguaciones en los Andes de Andahuaylas no hemos podido encontrar una palabra quechua que signifique recurso natural y mineral inerte, sino todo lo que existe en la naturaleza son vivas, amadas y tienen ánima.
Es así que si la Yaku Mama es madre, no se la negocia, no se la vende, no se la agrotóxica, no se succiona con motobomba del subsuelo, ni se la contamina con la excrecencia del porcino, porque es sangre y fluido de la Pacha Mama, de las entrañas de la tierra amada que cría y amamanta a todos, por lo que su conservación es un ritual donde participa todo el pueblo”.
Más adelante expresa el contraste con un colegio en el que el profesor de ciencias define el agua como "H2O" y en el uso de términos técnicos legales para referirse al agua como “factor de producción”, objeto de explotación, un "recurso hídrico", como si fuera un objeto inerte, insaboro, inodoro, incoloro, insípido, inorgánico, un bien transable en forma sólida, líquida o gaseosa.
En suma, el agua es tratado como objeto, como cosa, intercambiable, definible por una fórmula química, con lo que pierde toda su esencia espiritual y tradicional.
Esta confrontación de conceptos, lenguajes, valores, actitudes frente a la naturaleza y sus bienes me produjo múltiples asociaciones con la interculturalidad, con los conflictos entre nativos e inversionistas modernos que explotan los recursos naturales, entre calendarios nacionales y locales, y las cientos de costumbres, fiestas, tradiciones nativas así como el uso del lenguaje autóctono como expresiones de una brecha cultural que cada vez que quiera ser ignorada o reprimida a la fuerza, lejos de producir una sana aculturación solamente puede producir malestar y resentimiento.
Quién sabe en los colegios y en todas las carreras profesionales que se estudian en institutos y universidades peruanas debería haber un espacio para estudiar estas cosas y reflexionar sobre ellas, si es que seriamente estamos pensando en hacer del Perú una nación inclusiva, tolerante, solidaria y que sea capaz de convertirse en un espacio de convivencia pacífica entre los diferentes grupos étnicos que comparten el mismo territorio.
INFORMACION Y PODER CIUDADANO: NUEVAS FIRMAS
Más personas suscriben el pronunciamiento publicado en este espacio el 22 de septiembre pasado
Milagros Belaunde Martínez
Farid Kahhat
Hernán Lanzara Lostanau
Elaine Ford Deza
Maria Ines Calle Quiroz
Saúl Peña K.
Jorge Delgado V.
Ana María Gubbins Llona
Augusto Bouroncle Reinafarje
Juan Carlos Cortés
Giselle Terrasse Chavez
Patricia Chea Chea
Arlette Mahieux
Yole Tagliabue Sevilla
Luis Botto Cayo
Juan Diego Delgado Gallardo
María del Pilar Luna
Martín Portillo
Salomón Lerner Febres
César Campos
Jorge Montoya Manrique
Federico de Cárdenas
Eduardo Lores
Augusto Rey Hernández de Agüero
lunes, 17 de octubre de 2011
MOVIMIENTOS ESTUDIANTILES AYER Y HOY/ Alfredo Stecher
Los estudiantes universitarios (y con variante, también los
escolares) buscan que la educación sea entendida como un derecho y una
inversión social, promotora de equidad y democratización, a través de la
gratuidad de la enseñanza en todos los niveles, al menos en las universidades y
colegios del Estado, la eliminación del lucro (legalmente prohibido en las
universidades, pero ampliamente existente a través de negocios inmobiliarios),
un pago justo a los profesores, un sistema más adecuado de acreditación y de
control de las entidades educativas, la efectiva libertad de asociación, el
sometimiento de sus planteamientos a plebiscito.
Los estudiantes universitarios tienen como cabezas visibles
principales a dirigentes reflexivos, del Partido Comunista y afines a la
Concertación, con quienes tengo una gran empatía, pero acompañados de una
mayoría de dirigentes sumamente radicales, con posiciones ultras. Entre su
maximalismo y la torpe y a veces provocadora respuesta del Gobierno, por
diferencias ideológicas y un mal entendido principio de autoridad, han llevado
al movimiento a un punto difícil, a pesar del altísimo respaldo ciudadano del
que goza, visible y en las encuestas (de hasta 80%). Este se ha mantenido alto
a pesar de verse empañadas las movilizaciones por sistemáticos actos de
vandalismo de jóvenes encapuchados – probablemente una combinación de ultra
radicales, anarquistas y delincuentes comunes.
La intransigencia tanto del Gobierno como de muchos
dirigentes estudiantiles ha obligado a los dirigentes estudiantiles a no
continuar participando en la mesa de diálogo acertadamente instalada por las
autoridades. Eso se traduce en la pérdida del semestre para muchos estudiantes
– aún más para los estudiantes secundarios que han secundado el movimiento, con
énfasis en sus propias demandas, al igual que el denominado Colegio de
Profesores.
La ruptura de las conversaciones directas traslada, como ha
querido el Gobierno, el tratamiento del conflicto al Congreso, lo que en
principio es correcto. Pero también allí se topa con la resistencia de los
congresistas, teniendo la Concertación mayoría en el Senado. La sensación de
inminencia de la crisis económica está echando paños fríos a las expectativas
más elevadas respecto del financiamiento de la educación, pero, lo que es un
hecho, es que ésta va a recibir una atención política y presupuestaria
preferente en el futuro inmediato y mediato.
El movimiento ha buscado que los estudiantes puedan aprobar el
irregular primer semestre en cada universidad, en varios casos con ayuda de las
autoridades, pero amenaza con continuar en el segundo semestre la huelga y las
tomas de locales. Los analistas más lúcidos de la problemática de la educación
y de los movimientos sociales, y coincido con ellos, recomiendan a los
estudiantes buscar caminos de entendimiento para poder capitalizar en cambios
reales y profundos, pero realistas, el triunfo social y político que ha
significado su movimiento hasta ahora. Pero lo más probable es que continúe el
conflicto por tiempo indefinido.
Esto me recuerda mi propia experiencia. En 1966 la
Federación de Estudiantes de la Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM),
donde he estudiado economía en la antigua Facultad de Ciencias Sociales, inició
una lucha contra el cambio de un artículo de los estatutos de la Universidad
que disminuía el peso del tercio estudiantil en los órganos de gobierno, al
reducir el mínimo de votos necesarios para que un profesor sea ratificado en el
cargo, de una mayoría de dos tercios a mayoría absoluta.
Debo decir que, en retrospectiva, esa exigencia de dos
tercios me parece exagerada. Solo se explica porque quienes redactaron ese
estatuto habían formado parte, en la década previa, de un movimiento de
renovación de la Universidad, en su tránsito desde Escuela Nacional de
Agricultura, en el que profesores jóvenes y representantes estudiantiles
coincidían en el interés de sacar de la Universidad a profesores antiguos que
no se encontraban a la altura de las nuevas expectativas académicas. Para ello
estaban bajo la misma influencia que nosotros, del movimiento lanzado en
Córdoba, Argentina, en 1918, por la reforma universitaria. Cuando este artículo
de los estatutos comenzó a afectar su propia estabilidad en la Universidad
estos profesores, varios de ellos exdirigentes estudiantiles, respondieron con
su cambio.
Los estudiantes, en un significativo porcentaje realmente
interesados en una buena formación académica, consideramos el cambio una
afrenta al tercio estudiantil y respondimos con una campaña interna por su
anulación, la que desembocó en una huelga general indefinida, probablemente la
única por un solo punto de un estatuto (el artículo 91, si no me engaña la
memoria). En ese entonces éramos alrededor de 1800 estudiantes que
participábamos masivamente en asambleas generales, con pasada de lista para
constatar el quórum. Si mal no recuerdo el resultado de la votación, en urna, con
una muy alta participación, fue alrededor de un 90% a favor de la huelga.
La federación de estudiantes estaba en manos de
acciopopulistas, con la solitaria excepción de la secretaría general de
organización, que tenía a su cargo interior, defensa y organización, que yo
ocupaba como representante del Movimiento de Unidad Estudiantil, movimiento
único de izquierda. Las elecciones eran cargo por cargo. En el comité de huelga
predominaban posiciones más radicales de la izquierda y del socialcristianismo.
El acatamiento a la huelga era total, y muy alta la participación en
movilizaciones.
Después de varias semanas de huelga las autoridades
decidieron dar un ultimátum en el sentido de anular el semestre académico en
caso de no levantarse la huelga. Personalmente no tenía problema de afrontar
esa pérdida (hay que recordar que la universidad, como entidad del Estado, era
en ese entonces completamente gratuita), pero pensaba que una mayoría iba a
preferir ceder, por lo que, a diferencia de una mayoría de dirigentes de
izquierda, estaba dispuesto a levantar la huelga y a adoptar otras medidas de
presión. Sin embargo ni siquiera pude asistir a la asamblea general en que se
decidiría nuestra posición, debido a una fuerte gripe con afonía total. Para mi
sorpresa, la asamblea, con amplísimo quórum y, si no me equivoco, con alrededor
de un 90% de votos – en urna – decidió mantener la huelga. En ello se
expresaba, creo, tanto el efecto de nuestra prédica en una gran mayoría, como
la falta de ganas de retomar el estudio de parte de una minoría, probablemente
significativa.
Las autoridades declararon el receso de ese segundo semestre
del año. En tanto los órganos de gobierno seguían funcionando – más
espaciadamente – continuamos allí nuestra lucha – yo era también delegado al
Consejo Universitario – y transformamos nuestra exigencia en una de obtener un
reglamento de evaluación docente con significativa participación estudiantil, a
la vez que amenazábamos con seguir la huelga en el siguiente semestre. Por el
temor de una parte de las autoridades y con el beneplácito de otra parte de las
mismas, más abiertas a las demandas estudiantiles por la calidad docente,
obtuvimos ese reglamento con características bastante favorables.
Debo decir que el tercio estudiantil, que en mi universidad ejercíamos
y defendíamos, en general, con una posición responsable por la mejora de la
Universidad al servicio del país, se prestó en muchas universidades a
contubernios entre profesores y dirigencias estudiantiles con intereses entre
personales y políticos burocráticos. En nuestro caso, a pesar de nuestras
posiciones incorrectas y ultras respecto de la realidad nacional y la solución
revolucionaria a sus problemas, defendíamos una universidad autónoma,
auténticamente pluralista, con respeto a la libertad de cátedra de cualquier
posición ideológica y política, y una real democracia en el movimiento
estudiantil.
jueves, 13 de octubre de 2011
CRISIS, ATERRIZAJES EN PICADA O CONTROLADOS/ Alfredo Stecher
En la crisis actual o gran
contracción hay un importante componente de ineluctabilidad, pero otro que
depende de lo que se haga y no se haga en cada espacio político-económico, sea
en el sentido de amortiguarla con acciones adecuadas, sea en el de agravarla
por inacción o medidas inadecuadas o también como profecía autocumplida, por la
que, como sociedades y mercados, podemos alcanzar los peores resultados por
convencernos de que son inevitables.
La economía mundial y cada
economía componente de ella, probablemente sin excepciones, tendrán un
aterrizaje forzoso. La cuestión es solo si ese aterrizaje, siendo de todos modos
grave, es relativamente amortiguado o si es una caída en picada, tipo desastre,
como los casos de Irlanda e Islandia antes y de Grecia ahora, y si el desastre
se limita a algunos países o se extiende como reguero de pólvora o castillo de
naipes que se derrumba.
Según el secretario general
de la OCDE, Europa ya vive algo no muy distinto de una recesión. Considera que
la situación actual es producto de “cuatro fracasos enormes: en regulación,
supervisión, gobierno corporativo de las empresas y gestión del riesgo.” En la
apreciación de la coyuntura actual se subraya mucho el parecido de algunos
indicadores del sistema financiero con aquellos previos e inmediatamente
posteriores a la caída de Lehman&Bros – lo que llaman el “momento Lehman”
-, que desencadenó el casi colapso del sistema bancario.
En el caso de Europa los
intereses nacionales, la miopía y la debilidad política dificultan la
preparación de un aterrizaje menos desastroso. Europa está al borde del abismo
ante la al parecer inevitable suspensión de pagos de Grecia – postergada un
tiempo por el reciente rescate adicional - y ante el probable efecto dominó
sobre otras economías europeas. Felizmente sus cabezas políticas parecen estar
aprendiendo a golpes y se quedan hasta ahora a un paso del abismo, haciendo
esfuerzos por un salvataje tanto de Grecia y otras economías como de los
grandes bancos. A ello contribuye el estimado del costo del efecto extremo de la
salida de Grecia (deseada por algunos) de la eurozona: según un analista, desplome
de PIB griego en entre 40 y 50%, bancarrota de sus bancos, duplicación
inmediata de su deuda, necesidad de enormes sumas para recapitalizar entidades
de crédito y seguros en toda Europa, descrédito de Europa en su conjunto,
probable liquidación del euro y de la propia Unión Europea. Otro estimado es
que incluso Alemania podría sufrir una reducción de hasta 40% de su PIB.
Con razón, aunque a
regañadientes, Ángela Merkel, la canciller alemana, ha afirmado que “el euro es
una garantía de la unidad europea o, dicho de otra manera, si el euro fracasa,
Europa fracasa”, y está propugnando medidas mayores para evitar el desastre. En
particular plantea, junto con Nicolás Sarkozy, el presidente de Francia, un
plan para recapitalizar la banca europea – señal de lo crítica que es la
situación de ésta. Pero la principal fuerza en los esfuerzos por estabilizar la
economía europea, insuflando liquidez, es el Banco Central Europeo, a su vez
presionado por el FMI – hasta ahora en contra de la resistencia alemana - hacia
una política aún más activa y amplia de respaldo de los bonos soberanos
europeos, cuya pérdida de valor en los mercados son la principal amenaza para
la banca tenedora de éstos. También el Banco de Inglaterra está inyectando
liquidez a su economía a la vez que mantiene bajos los tipos de interés para
estimular la inversión.
Crecen las voces a favor de
medidas contracíclicas y contra la excesiva austeridad para evitar una
contracción más aguda, situación a la que se está encaminando Europa hasta
ahora. Como dice Krugman, la política de austeridad inmediata es como la
sangría de la medicina antigua, que debilita al paciente y hace más
problemática su recuperación futura.
Europa, además de las
medidas de salvataje de sus bancos y de las economías más débiles, necesita una
fuga hacia adelante: fortalecer y ampliar el euro, lo que exige tener una
política fiscal común, fortalecer la política de Schengen, de libre movimiento
de personas, y tener una política exterior común. Nada asegura que eso se
logrará, pero es posible.
Sin embargo hay opiniones,
que no comparto, como la del premio Nobel de economía, Myron Scholes, que
considera que la pregunta no es si la eurozona colapsa, sino que cuándo.
Creo que Europa va a hacer
lo que Churchill dijo o se le atribuye haber dicho sobre Estados Unidos, que
hacía siempre lo correcto una vez que había probado todas las demás
alternativas.
Una de las paradojas de la
situación actual es que la crisis que amenaza con desintegrar a Europa está
movilizando fuerzas que ayudarán a mantenerla e incluso a estimular al G-20,
grupo de las 20 principales economías, a abordar nuevamente las tareas que ha
dejado planteadas y abandonadas, en particular la regulación, control y freno
de los capitales especulativos. La principal herramienta en ese sentido parece
ser la llamada tasa Tobin o Robin Hood, impuesto sobre intercambios monetarios
internacionales, con el objetivo de restar atractivo a las operaciones
especulativas de muy corto plazo. Ésta es técnicamente factible y cuenta con un
creciente respaldo académico y político – aunque es resistida por Obama. Hasta
el FMI propone una tasa fija sobre activos bancarios, especialmente los de
mayor riesgo, y una tasa sobre los beneficios. Otra medida necesaria es una
mayor regulación de los bancos en el sentido de limitar su capacidad para
incurrir en inversiones arriesgadas.
Navegamos en aguas
procelosas. A escala mundial mucho dependerá de que primero Europa y luego
China logren un aterrizaje amortiguado y eviten la caída en picada.
Hasta ahora en el Perú
parecemos inmunes a los efectos más graves de la agudización de la crisis, pero
es probable que los buenos tiempos económicos se nos estén acabando.
jueves, 6 de octubre de 2011
LA CRISIS SE APRESTA A GALOPAR/ Alfredo Stecher
La crisis económica mundial
es un tema ya tan trillado que casi no da ganas de tocarlo. Y sin embargo es
importante que tomemos más conciencia de sus características e implicancias.
La buena noticia es que el
mundo seguirá existiendo, que seguirá habiendo producción y mercados. No
estamos ante un fin del mundo – aunque sí ante un mundo en acelerado cambio en
todas las esferas. La mala noticia es que todo indica que la crisis económica se
está agravando a paso acelerado, que será muy profunda y que tiene para rato.
Una década es un buen estimado. Desde agosto hay claramente una inflexión en el
debate público: ya parecen ampliamente mayoritarias las voces académicas,
empresariales y políticas que creen entre segura y más probable una recesión, y
los mercados reaccionan en consonancia.
Concuerdo con la precisión del
economista Kenneth Rogoff, quien considera erróneo calificar a la situación
actual de gran recesión, como si fuera una más de las muchas vividas desde la
Gran Depresión, y propone calificarla como “segunda gran contracción” (habiendo
sido la primera la Gran Depresión de 1929, en tanto crisis financiera típica,
con lo que coincido - sin embargo seguiré usando la palabra crisis por su uso
más común). Afirma: “El verdadero problema es que la economía mundial está
gravemente sobreapalancada y no existe ninguna salida rápida sin un esquema
para transferir riqueza de los acreedores a los deudores, ya sea a través de
cesaciones de pago, represión financiera o inflación.” En concreto propone que
los gobiernos faciliten la rebaja de las hipotecas a cambio de una
participación en cualquier apreciación futura del precio de las viviendas,
realizar un rescate mucho mayor de Grecia, a cambio de pagos más altos dentro
de 10 o 15 años, y dejar que la inflación alcance entre un 4 y 6%, que, siendo
una transferencia injusta y arbitraria de ingresos de los ahorradores a los
deudores, es sin embargo el único camino rápido hacia una recuperación. De
hecho el valor de las propiedades inmobiliarias de las familias en Estados
Unidos cayó de 13,5 billones de dólares en 2006 a 5,3 billones en 2009, según
la Reserva Federal, y ha seguido cayendo, sin que cambiara por ello el valor de
las deudas hipotecarias, de modo que hay 11 millones (28,4%) de propietarios
con deudas superiores al precio de sus propiedades.”
Como muchos otros analistas
y especialmente los responsables de las políticas económicas, un analista
técnico de los mercados bursátiles, John Bollinger, trata de tranquilizarnos respecto
de la crisis, él con la aplicación de su modelo predictivo, de bandas de
precios, del comportamiento de los activos en el mercado. Según este modelo los
principales índices bursátiles han tocado piso y deberían pasar a una tendencia
al alza. Que el modelo al parecer haya sido útil en los últimos lustros,
lamentablemente no garantiza que lo sea de aquí en adelante, dada la singular situación
de acumulación de problemas en la que se encuentra la economía mundial.
Quienes como él pronostican
una pronta salida de la recesión señalan que ésta se ha debido a elementos
puntuales que no se repetirán (elevación de precio del petróleo por las crisis
en el Norte de África y el Medio Oriente y el aumento del precio de los alimentos,
que redujeron el ingreso disponible de los hogares, el terremoto del Japón, que
afectó la cadena industrial mundial, así como el empantanamiento político en
los Estados Unidos y la cesación de pagos de Grecia, que serían superados).
Obviamente no comparto esta opinión, porque éstas y peores cosas seguirán
sucediendo. La crisis financiera ha sido comparada con razón con un huracán, de
recorrido y magnitud prácticamente imposibles de prever. Me llama la atención
que Warren Buffet esté entre quienes prevén una crisis relativamente corta.
Estamos viviendo la crisis
de dos de los tres grandes centros de poder económico y político: ya de años,
Estados Unidos, reciente, Europa. Todo indica que el tercero, China, también se
encamina hacia una crisis, no solo por el contexto internacional, que afecta
sus exportaciones, sino también por un cada vez más precario equilibrio entre
los imperativos económicos internos y los socio-políticos; sus grandes
problemas son la inflación, la desigualdad y la corrupción. Ojalá China logre
postergarla, de modo de contribuir a un aterrizaje menos violento de la
economía mundial.
Thomas Friedman considera
que Estados Unidos está ante la elección entre una década dura y un siglo malo.
Por extensión esto vale para todo o gran parte del mundo.
Tenemos simultáneamente una
crisis de liquidez y de iliquidez: una falta de liquidez de las entidades
financieras encargadas de proveer dinero a la economía real y un exceso de
liquidez especulativa. El mercado financiero paralelo o sistema bancario a la
sombra, que resumidamente podemos llamar el de los derivados o apalancados, es
en la práctica un esquema Ponzi, como el aplicado por Madoff, solo que a mucho
mayor escala.
¿Cuáles son los refugios de
esta colosal liquidez, que incluye a millones de propietarios de acciones, de
bonos y de dinero en efectivo? Los no especuladores profesionales buscan principalmente
preservar el capital:
Sus refugios son la deuda
pública de los países más solventes (Alemania, Suiza, Estados Unidos), el oro, las
monedas duras (corona noruega, yen), depósitos en bancos custodios,
garantizados por el fondo de garantías de depósitos (bancos de bancos, como el
Bank of New York Mellon y el JP Morgan Chase). Hasta ahora también funcionaban
como refugios muchas materias primas, pero ante el creciente temor de una
recesión mundial el alza de sus precios se está viendo frenada y revirtiendo. Las
bolsas, en las que se expresan muchas de las decisiones de estos actores, están
a la cola de los acontecimientos, como manada sin rumbo, reaccionando positiva
o negativamente ante los últimos datos disponibles.
En la crisis se combinan además
problemas de insolvencia con problemas de falta de liquidez. Por un lado
tenemos la potencial insolvencia de los bancos y de varios estados europeos, principalmente
del Sur (Irlanda e Islandia – ésta hasta ahora fuera de la eurozona - ya están
de salida en un proceso penosísimo), debida a burbujas, a déficits y alto
endeudamiento de los estados y a la tenencia de parte de los bancos de deudas
estatales desvalorizadas, en un contexto de insuficiente crecimiento y hasta
decrecimiento de las economías nacionales. Por otro lado tenemos además la
falta de liquidez por la creciente desconfianza entre los actores económicos,
lo que lleva a algunos analistas a calificar la crisis como una crisis de
confianza, aunque ésta es en realidad la consecuencia de los fenómenos
económicos subyacentes.
La crisis de confianza se
manifiesta por ejemplo en la incapacidad de los bancos europeos de obtener créditos
habituales de más de un día, interbancarios, lo que ha obligado al Banco
Central Europeo a ofrecerles acceso ilimitado a sus subastas y a los estados a
prepararse para nuevos rescates. Aún así acaba de entrar en crisis uno de los
más grandes bancos europeos, Dexia, semipúblico, que será rescatado por segunda
vez por los estados en los que actúa (Francia, Bélgica y Luxemburgo).
Una idea de la situación de
los bancos la da la caída en el último año del valor bursátil de dos de los más
grandes bancos alemanes, Commerzbank 74%, Deutsche Bank más de 50%. La bolsa
española ha caído casi un 20% en lo que va del año y un 50% desde sus máximos
históricos en 2007. Muchas empresas valen ahora menos en bolsa que en libros y
están expuestas a opas (ofertas de adquisición) hostiles, para las cuales sin
embargo no aparecen oferentes, indicador de mercado de que se espera tiempos
peores.
jueves, 22 de septiembre de 2011
INFORMACION Y PODER CIUDADANO
Las
autoridades tienen la obligación de alentar y de facilitar el seguimiento de sus
políticas por la población.
Sólo con
información presentada de manera ordenada y exhaustiva es posible el escrutinio
público. En cambio, son inútiles los datos proporcionados de modo disperso e
intermitente; más bien, sirven muchas
veces para encubrir la inacción y la
improvisación.
En
consecuencia, pedimos que las páginas web de los organismos públicos sean
reformuladas, para que, por cada política anunciada, se establezca un espacio fácilmente
distinguible, en el que se reúnan y queden registradas, sistemática y
cronológicamente, las decisiones efectivamente tomadas para cumplirla, con indicación del número, fecha, y, de ser el
caso, fecha de publicación en el Diario Oficial El Peruano de la correspondiente
resolución, directiva u otra disposición legal, así como de cualquier otra
medida, incluyendo los nombramientos de responsables y las adquisiciones de
bienes y servicios.
Todos los
ciudadanos, y no sólo los especialistas, aspiramos a leer correctamente el
accionar de las autoridades, y, así, estar en condiciones de determinar si éstas
actúan o no con coherencia y seriedad, más allá de que los resultados buscados puedan
a veces demorar por la naturaleza y la complejidad de los problemas enfrentados.
Ello, por cierto, incluye, también, la posibilidad de detectar el abandono inopinado
de estrategias, lo que, con frecuencia obedece, no a una razón válida, sino a
la tradicional y muy costosa incapacidad de mantener un mínimo de continuidad en
las políticas públicas del país. El Estado está entonces en la obligación de diseñar
y proporcionar las herramientas necesarias para que los ciudadanos podamos cumplir en las mejores condiciones nuestro deber
de fiscalización.
Lima,
22 de septiembre de 2011
Carlos
Basombrío
Hugo Díaz Díaz
César Jaime
Ramirez
Carmen
Berrocal
Jaime de
Althaus
Patricia
Pinilla
Enrique
Carrillo Thorne
Gustavo
Ramírez Díaz
Francisco
Belaunde Matossian
Jose Pajuelo
Oliveri
Alfredo Solf
Monsalve
César Zevallos
Heudebert
Alfonso de los
Heros
José Belaunde
Moreyra
Javier Colina
Seminario
Maria Luz
García Belaunde
Carlos Batalla
Sotelo
Manuel Cacho
Sousa Barrios
Eduardo Gómez
de la Torre
Rosa María
Gastañeta Alayza
Benjamín
Marticorena Castillo
Gino Costa
Santolalla
Alvaro Roca-Rey
Jorge Cárdenas
Vidalón
Yvonne
Belaunde Olschewski
Alexis
Benavides
Gabriela
García
Martín Giurfa
Jasminoy
Patricia
Schroth
Dina Paz
Sparks
Eduardo
Montenegro Soria
Augusto Cabada
Augusto Lopez
Vásquez
Raul Marcel
Montalvo Nory
Luis Botto
Cayo
Javier
Fernández Bravo
Lorena Borgo
Hannach
Ana Silvia
Pineda
Alejandro
Desmaison
Aldo Parodi
Juan Manuel
Alpiste Caro
Jaime Alonso
Llosa Talavera
Ramiro Escobar
La Cruz