domingo, 26 de junio de 2011

PUNO EN LA ENCRUCIJADA /Martha Giraldo

(Publicada con la autorización previa de la autora, orgullosa hija de Puno, luchadora política, fundadora del movimiento por los derechos humanos peruano en los difíciles años ochenta y empresaria del turismo CBI).


Puno, 16 de Junio de 2011,

Querid@s amig@s:

Los saludo con mucho cariño, afectada y desconcertada con lo que vivimos en este  aciago mes y disculpen, si altero su tranquilidad y les quito tiempo, pero necesito compartir con ustedes acerca de los sucesos que han colocado a Puno en la vitrina de la actualidad socio-política y como muchas veces anteriores, mostrando el rostro de la intransigencia y violencia injustificada.

Podrían, a partir de la última frase, pensar que estoy subjetivizada, nada de eso, esta carta es para contarles de manera coloquial todo lo que he podido averiguar acerca de los entretelones de la demanda “No a la minería, No a la explotación petrolera, No a los proyectos hidro-energéticos”, origen de los sucesos que aún no concluyen y que son tan sólo una arista de la problemática.

Inicialmente pensé escribir un artículo, he desistido, aquí no hay prensa local que lo publique, pocos leen, nadie debate con argumentos y muchos agreden, así que opto por este camino de confianza. Sin duda alguna, debe haber mucha información que desconozco; aquella de la que no tengo certeza, la pongo en condicional y las afirmaciones, son informaciones verificadas.

Puno, en la encrucijada

La economía de Puno descansa en la producción agropecuaria (papas, carnes, lácteos, cebada, pastos, quinua, oportuno mencionar a los laboriosos productores de la nuevas cuencas como Taraco, Progreso, Macarí, Umachiri, Llalli Mañazo, etc.), artesanía (tejidos a mano y pequeñas máquinas y telares, mucha de la cual se exporta y es producida mayormente por miles de mujeres quechas y aymaras), minería formal (Minsur, Arasi, Aruntani, Huacotto, etc.), turismo (hoteles, hospedajes, agencias de viaje, restaurantes, destinos rurales, guías, transporte), pesca artesanal y acuicultura, una fábrica de cemento, la única industria de la región!!!, algunos talleres de confecciones, una cooperativa cafetalera en Sandia,  algunos centros comerciales formales en Juliaca y Puno; empleo en servicios, negocios diversos, en entidades públicas, ONG y algunas empresas de transporte formales.

Paralelamente, un gran contrabando, de tales volúmenes que se distribuye hasta Arequipa, Lima, Cusco, Madre de Dios, Abancay, que cuenta con soporte logístico de almacenes, camiones, buses, camionetas, talleres de reparación, tiendas de repuestos, seguridad, etc. y del que todos los ciudadanos de Puno nos servimos alegremente en la medida de nuestras necesidades (por ejemplo licores, galletas, chocolates, sábanas, artefactos, caprichos para el buen comer y vivir); minería informal descontrolada (quebradas amazónicas y al pie de glaciares en Ayapata, Coaza, Sina, Limbani, Phara, Patambuco, San Gabán, Ananea / Rinconada, sólo aquí se calculan más de 30 mil extractores y que se proveen de explosivos, botas, cascos, mamelucos, gas, combustible, linternas, miles de celulares, vía el contrabando), cocales en expansión en los valles de Sandia, San Juan, San Ignacio, San José, Putina Punko, San Gabán, Ayapata, Coaza, es vox populi que ahora se transforma en cocaína y se exporta hacia Bolivia.

Una compleja, desigual y tensa convivencia entre un pequeño sector empresarial formal y una gran masa de hábiles y avezados productores y comerciantes informales, ilegales, a los que el Estado no ve, no siente, no huele.   

Gastón Acurio afirmó en TV que ser empresario era “un privilegio, un honor y una responsabilidad”; y efectivamente así es, pero en Puno, reconocerse empresario es un acto de estoicismo, porque hay que resistir epítetos como “testaferro, explotador, miserable, vende patria”.  Estos calificativos son endilgados a los mestizos formales, sean locales o venidos de fuera. Los miles de empresarios informales simplemente no son empresarios, son parte del pueblo sufrido y excluido del sistema, aunque movilicen millones de dólares en mercadería ilegal, tengan flotas de buses, camiones, trailers, maquinaria pesada, usufructúen yacimientos mineros informales, cocales, cafetales, tiendas y mercados, casas de cambio, cientos de tiendas de computadoras y teléfonos, inmensas ferreterías, no sólo en Puno, en Arequipa, Tacna, Moquegua, Madre de Dios, Cusco, llegando incluso hasta La Paz, Río, Sao Paulo. Ser quechua o aymara es garantía de contar con una patente étnica para todo lo permitido, legal pero también y sobre todo, para lo ilegal e informal que se pueda hacer. El normal, tradicional y ancestral intercambio fronterizo, ha devenido en economía paralela que mueve millones, corrompe y ejerce presión a todo nivel, de la misma forma que los grupos mineros informales y cocaleros.

No es casual ni fruto del abandono estatal y/o privado, que no haya inversiones PRODUCTIVAS en la región (excepción de algunas mineras y hoteles), no se puede invertir en Puno, no se pueden comprar tierras, no se puede instalar industrias porque fracasan frente a la competencia del contrabando, no hay mano de obra calificada, no hay proveedores primarios de calidad y formales. Siendo la mayor zona productora de fibras y lanas, ni una sola planta que las lave y las industrialice ¿por qué? Ni una planta de beneficio de carnes, siendo la primera región productora de carne de res y ovino. Si no fuera porque están Marcos Degen y los curas de Juliaca, no habría ni trucha ni quinua envasada (empresas con asistencia, por ello pueden operar esforzadamente).

Puno es una zona emisora de gente emprendedora, laboriosa y triunfadora, ¿dónde no hay puneños exitosos sobre todo como comerciantes? En todo el Perú están con florecientes industrias, tiendas, galerías, ferreterías, incansables viajeros itinerantes, los que quedan en el campo, como agricultores y ganaderos, son los viejos, los abuelos, los discapacitados, los menos favorecidos en habilidades, capacidades y proyectos, como decimos entre nosotros, los huesos, ellos, son quienes en representación de los que están fuera, pero que nunca pierden la propiedad de tierras, casas y ganados, son quienes sufren el rigor de las actividades que descansan casi completamente en el uso de la energía humana como fuerza motriz, ya tenemos entonces un déficit en el campo, excepción de las zonas ganaderas modernas como Taraco, Mañazo, Cupi, Llalli, etc.

La profesionalización de miles de hijos del campo, en todas las profesiones existentes, sea en la universidad nacional pero sobre todo en las particulares de la región (4) y las sucursales de más de 12 de otras regiones, e incluso de 2 de Bolivia. Tod@s legítimamente aspiran a un título profesional, aunque luego no ejerzan y se dediquen, por ejemplo, a los negocios, blanqueando el dinero del contrabando, del oro ilegal, la coca. Y otro gran sector como triciclistas, moto taxistas, ambulantes, cobradores, etc. que prefieren las ciudades al campo, éste, cada vez con menos brazos para el trabajo agropecuario y allí miles de hectáreas abandonadas o sub utilizadas, no hay tecnología que remplace la tracción humana.   

En este panorama, ya desmotivador y preocupante, en el que es frecuente la emergencia sea por frio, sequía o inundación, se grita a todo pulmón ¡No a las concesiones mineras, petroleras, hidroeléctricas! No a la presencia de empresarios foráneos!!! No a las empresas chupa sangre!!! No al turismo que sólo beneficia a las grandes cadenas chilenas!!! No a todo!!!

En Puno, tanto en el campo como en la ciudad, entre aymaras, quechuas y mestizos, la circulación de rumores y afirmaciones alejadas de la verdad es increíblemente profusa, ni la típica chismografía limeña se puede comparar y sólo para que se hagan una idea, unas cuantas perlas: “todo el agua es propiedad privada de García Pérez, que la vende al mejor postor y que es socio de las empresas que compran”; “el lago Titikaka está vendido a los chilenos”; “los hoteles Libertador son propiedad de Fujimori y sus socios chilenos”; “Casa Andina, cadena chilena”; “Suasi ha sido vendida a los chilenos”; “desde Suasi se bombea agua al norte de Chile”; “las empresas mineras pagaron canon sólo en la época de Toledo”; “García para incentivar la inversión extranjera, ha exonerado de impuestos, canon, regalías, a todas las empresas extranjeras”; “ todo el Perú está concesionado y vendido para la explotación minera” “las empresas mineras llegan de golpe y porrazo a tomar posesión de las tierras de los campesinos, y los comuneros súbitamente se enteran que no son más dueños de ellas”; “los canadienses de Santa Ana, nunca realizaron la consulta previa y no lograron la licencia social”;  “Arasi es de chilenos”; “Minsur no paga canon porque son amigos de Jiménez Sardón y Garrido Lecca” y, así, hasta el infinito.

En este contexto ¿qué papel juegan los diversos medios de comunicación? La radio es el medio al que acceden todos, sea en el campo y las ciudades. Existen infinidad de emisoras locales que en muchos de sus programas, en quechua y aymara (especialmente) difunden  como “noticias” decenas de afirmaciones similares o más alucinadas que las arriba consignadas; los programas de TV dan cabida a dirigentes, líderes, profesionales que sin ningún rigor ni objetividad dan por ciertas dichas  afirmaciones y elucubran análisis y teorías de despojo, venta, saqueo, entreguismo de parte de empresarios y funcionarios. Hace 25 años, conversando sobre este tema, me propuse por salud mental y tranquilidad espiritual no escuchar estas emisoras, pero, desde que vine a Suasi no puedo evitarlas, porque quienes colaboran conmigo, las tienen encendidas de mañana a noche, por ello es que conozco los contenidos y los mensajes y no me sorprende el resultado e impacto que han grabado en el alma, los corazones y pensamientos de miles de profesionales, comerciantes, contrabandistas, narcotraficantes, etc., etc.

Los actores

¿Quién es Walter Aduviri Calizaya? Hijo de comuneros de Mazocruz (provincia de El Collao), contador público, docente universitario, alpaquero a la distancia (pastores cuidan su rebaño ¿Cuántas alpacas? no pude averiguar), regidor saliente de la Municipalidad de Mazocruz.

Durante los sucesos de abril de 2004, que culminaron con el asesinato de Cirilo Robles, alcalde de Ilave, destacó por sus capacidades de organización y movilización de la juventud, dando muestras de arrojo, audacia y osadía. Una vez elegido el nuevo alcalde, los tenientes gobernadores (verdadero poder en la zona aymara), impusieron a Aduviri -considerando los méritos reconocidos y la formación profesional de contador- como jefe de almacenes de la municipalidad de Ilave, durante su gestión mostró otras facetas como prepotencia, intimidación, abuso y soberbia, se dice que  habría cometido peculado y llevado doble control, por lo que fue despedido y tendría un juicio y el expediente estaría en Contraloría. La ciudad de Ilave no se sumó a las movilizaciones. Será porque conocen a Aduviri? Nunca olvidar que quienes dirigieron la huelga que culminó en el asesinato de Robles fue liderado por los tenientes gobernadores.

¿Cuándo, dónde, quienes y con qué objetivos se formó el Frente de Defensa de los Recursos Naturales que preside Aduviri y a nombre del cual en supuesta defensa de la madre tierra recusa toda actividad minera? Poco o nada se conoce sobre dicho frente, todo hace suponer que es una organización que se activa en función de eventos concretos, tal vez importante cuando rechazaron la creación de la Reserva Aymara Lupaka; fuera de la comunicación enviada y tramitada por Lezcano al Inrena en 2004, firmada por Aduviri, no he podido recabar nada más al respecto.

Los presidentes Jiménez, Fuentes y Rodríguez, autoridades regionales grises, incapaces y demagogos, junto a consejeros, alcaldes y regidores, nada efectivo han hecho por la región. En campaña, todos sin excepción, ofrecen promesas sin límites y todos también apelan al electorado quechua aymara por ser abrumadoramente mayoritario tanto en el campo como en las ciudades. Los dos ex presidentes regionales y el actual, han tenido discursos anti-mineros, anti-empresa, anti-inversiones y han alentado posiciones de enfrentamiento con el Gobierno Central por su lejanía, desinterés y ausencia. Han sido presas de sus discursos, escasa gestión y deficiente capacidad de inversión. Ninguno propuso cambios que desarrollen la región, sólo pequeñas obras y mucho asistencialismo, que ahonda la conducta pedigüeña, mendicante y de victimización de líderes y comuneros.

Respecto de Vasty Lezcano, Abraham Ccauna, Hermes Ccauna, públicos agitadores senderistas que sin hipocresías ni medias tintas participan de la actual asonada, qué puedo decirles, que andan sueltos y sin temores.

Ayer lunes salió un artículo en el diario Los Andes ¿quiénes están detrás de Aduviri? Hay que leerlo para tomar conciencia de hacia dónde apuntan verdaderamente las acciones aymaras.

Decirles con tristeza, que no imaginan cómo los campesinos aymaras se portaron en la ciudad los días del paro, que fueron una verdadera ocupación: agresivos, racistas, intolerantes, abusivos con todos quienes se atrevieran siquiera a vender panes; tomaron por asalto plazas, parques, óvalos y ahí mismo instalaron cocinas, dormitorios, comedores y baños. Varias cuadras a la redonda de la plaza de armas,  los hedores eran insoportables, me pregunto ¿tienen derecho a agredirnos de esa manera? Luchar por sus reivindicaciones les da derecho a atropellar los de otros? Un valiente y humilde chofer aymara, responsable de conducir la ambulancia del hospital de Juli, comentó indignado que llevaba un niño aymara enfermo a Puno, y que hicieron los del piquete? Desinflaron las llantas, lo pegaron y aún no repuesto de la golpiza, fue testigo de los correazos que les propinaron a unos turistas italianos que desesperados por llegar a Puno, decidieron caminar y además, los desvalijaron sin reparos. 

Saben de mi entrañable identificación con Puno, su geografía, el legado de los Caluyo y Pukaras, sus paisajes, la música única y que emociona hasta las lágrimas, pero desde tiempo, siento que con muchas de sus gentes, menos cosas me unen; respeto las diferencias culturales, pero también creo que hay valores universales como la verdad, el respeto, la tolerancia, la alegría por el éxito ajeno, el cuidado de niños y ancianos, la amistad sincera. El aire está enrarecido y no por la altura, racismo y odio increíbles es lo que visto y escuchado en rostros de personas que creía amigas y eso me lacera el alma, por ello, es probable que salga de Puno, al menos por un buen tiempo, necesito sanar las heridas y renovar mi esperanza y alegría.

Les mando un abrazo fuerte, inmenso y curativo como el Titikaka.

Con afecto

Martha

 

8 comentarios:

Alfredo Stecher dijo...

Estimada y recordada Martha: Tu relato conmueve y aterra. Es triste. Necesitaremos décadas de otro tipo de educación para revertir este lastre. ¿Percibes algo diferente entre los jóvenes, premunidos de artefactos con acceso a Internet?
Un abrazo, Alfredo

Luis Enrique Alvizuri dijo...

Estimada señora Giraldo:
1. Entiendo perfectamente su punto de vista, pero si lo que usted al final dice (y que aclara muy bien lo que piensa) " ...respeto las diferencias culturales, pero también creo que hay valores universales como la verdad, el respeto, la tolerancia, la alegría por el éxito ajeno, el cuidado de niños y ancianos, la amistad sincera.", si eso, repito, fuese una "verdad universal" pues jamás se hubiesen producido todo tipo de cambios y revoluciones que se han dado en la historia del ser humano y hasta ahora estaríamos viviendo en la edad de las cavernas manteniendo los "principios y valores universales" de aquel tiempo (que ignoramos cuáles fueron ni si existieron).

2. Siempre en toda sociedad hay quienes están contentos con ella y quieren, a toda costa, perpetuarla; son los que, por lo regular, se llaman de "derecha", concepto que no es otra cosa que el dejar las cosas como están y con la estructura social intocable (apenas con algunas reformas para que no cambie nada). Pero también existen los que se hallan descontentos, aquellos que, en la repartición de beneficios, son los que menos ganan y terminan trabajando como esclavos (modernos, pero esclavos) de los que están felices con "los valores universales".

3. Pero ¿qué son esos "valores universales" que usted pone por encima de los nuestros y de los de sus familiares y paisanos? Pues no son otros que los occidentales, aquellos que han sido impuestos por la Sociedad de Mercado a raíz del triunfo de una facción durante la Segunda Guerra Mundial. Dichos "valores", bien analizados, no reflejan otra cosa que la permanencia de una visión de hombre y de mundo que se corresponde con la Modernidad y el dominio globalizado del planeta por parte de dicha civilización.

4. Usted, sin darse cuenta, participa en ellos y cree ciegamente que son lo que son puesto que no ha reparado en sus orígenes e intenciones. Actualmente el mundo se encuentra sujeto a ellos como con una cadena y son una condena que impide que diversos pueblos reivindiquen sus identidades ya que eso "perjudica" al perfecto orden establecido para que la Sociedad de Mercado no se vea alterada.

Luis Enrique Alvizuri dijo...

5. Sin embargo la historia no es tal como la quería Fukuyama y su Fin de la Historia ni Occidente es la medida de todas las cosas. Los tiempos siempre se renuevan y lo que hoy se cree mañana será olvidado. ¿Es posible impedirlo? Estados Unidos se encuentra en ese esfuerzo (por mantener los "principios de su nación", como dice Obama) pero lo cierto es que las transformaciones no dependen de cuán poderoso sea el ejército imperial procurando orientar al mundo para "que no cambie".

6. Lo único universal que existe es que no hay universales, y que cada pueblo y cultura tienen derecho a su espacio, a su autonomía y su identidad, aunque una fuerza mayor, como la del Estado peruano, trate de impedirlo y pretenda sujetarlo lo más posible a su pasado de conquista y oprobio. Hoy los pueblos de todo el mundo, desde Asia, África, los musulmanes, los europeos y los latinoamericanos se encaminan inevitablemente hacia su libertad, libertad perdida a causa de un proceso de colonización iniciada en el siglo XVIII por las potencias occidentales quienes los privaron de sus espacios geográficos, de sus culturas propias, de su identidad y orgullo para someterlos a un concepto totalitario e integrador en nombre de "toda la humanidad", como si obedecer los intereses de esas transnacionales fuese la voluntad de "todos los pueblos de la Tierra".

7. El Perú, al igual que Venezuela, Bolivia, Ecuador, Argentina, Brasil y otros más se encuentra en vías hacia la recuperación de su ser perdido por el abuso, el exterminio y la violencia de Occidente durante siglos. Eso, por supuesto, no lo aceptan ni quieren los dominantes y sus representantes locales. Pero por algo, señora Giraldo, hemos elegido a Humala (cosa que hasta ahora pocos entienden) y es porque aquí también necesitamos una revolución de “principios” y de leyes donde unos no sean los únicos favorecidos y otros los perjudicados. ¿Por qué entonces no salieron elegidos todos los otros candidatos de la continuidad del sistema y de los "principios universales por encima de los de mi nación"? Pues porque esos "principios universales" que usted defiende no lo son para nosotros, para los pueblos de toda Latinoamérica.

8. Los pueblos queremos, señora Giraldo, otros principios que, en vez de proteger la "propiedad privada" (las transnacionales) y la explotación de la tierra como cosa respeten antes que nada la vida, no la de los comerciantes y funcionarios estatales solamente; me refiero a la vida en general, a la del hombre, de los animales y la pachamama (concepto que va más allá de la palabra “tierra”). Todo eso es la vida y nada que lo impida puede ser considerado "principio universal". Y por último piense que si esos "principios" hubieran sido respetados por los primeros norteamericanos y por Washington hoy no existirían los Estados Unidos (país declarado "terrorista" por Inglaterra desde un comienzo) pues toda revolución implica violencia y reforma. De modo que investigue un poco en la historia y descubrirá, para su sorpresa, cómo los "principios universales" se transforman cada 20 o 30 años, según los avatares de la política, la economía y la filosofía.
Muchas gracias.

Anónimo dijo...

“…En este contexto ¿qué papel juegan los diversos medios de comunicación? La radio es el medio al que acceden todos, sea en el campo y las ciudades. Existen infinidad de emisoras locales que en muchos de sus programas, en quechua y aymara (especialmente) difunden como “noticias” decenas de afirmaciones similares o más alucinadas que las arriba consignadas; los programas de TV dan cabida a dirigentes, líderes, profesionales que sin ningún rigor ni objetividad dan por ciertas dichas afirmaciones y elucubran análisis y teorías de despojo"…


Nosotros los limeños vivimos algo similar. Aquí en la capital los medios de comunicación están invadidos por expertos que, “sin ningún rigor ni objetividad”, elucubran análisis y teorías conspirativas. Los más de dos centenares de conflictos sociales que la Defensoría del Pueblo ha detectado han causado tal perplejidad en nuestra elite intelectual que unos los han visto como resultado de un complot cubano (C. Valenzuela), otros como instigación del narcotráfico, el contrabando y demás lacras sociales que sin duda están pescando en rio revuelto (Rospigliosi), y no faltan aquellos que tratan de explicarlos haciendo uso de las teorías del “choque de civilizaciones” (H. Guerra, El Comercio) y de la “otredad” cultural (Silva Santisteban, La República).
Todos estos análisis seudocientíficos comparten algo en común: todos convierten las ilegalidades cometidas por el Estado y las corporaciones en irrelevantes, y todos también nos tratan de proyectar una imagen del hombre andino como una subespecie humana refractaria a todo esfuerzo “civilizador”.

Supongo que en todas partes se cuecen habas.

Marcos Pasapera dijo...

Hola Martha, Felicitaciones por la valentia para escribir la presente, ademas por la objetividad de la mismo. Si no miramos al Perú como un todo hermetico, donde depongamos cualquier interes personal en pro de los intereses comunes de todos los peruan@s, jamas construiremos un pais con identidad que nos permita superar los problemas: politicos, economicos y sociales donde muchas personas dedicadas al politiqueo, han encontrado un nicho social que les permite vivir comodamente donde su hijos y familiares estudian en los mejores colegios y universidades, visten ropa de marca y frecuentan lugares (restaurantes) cuyos servicios publicos no estan al alcance de las personas de a pie........

Chalo dijo...

El señor Alvizuri cree que toda asonada de criminales es una revolución. Y que toda majadería es una reivindicación de "valores propios de una comunidad oprimida".

Con este mismo discurso no me es dificil imaginarmelo hace treinta años reivindicando la "revolución de Guzmán" como un gran paso en el cambio de paradigmas culturales. Y así como hoy justifica el caos, el robo, el latrocinio y el abuso en general como costos de su inflamada "revolución", mutatis mutandis también podría haber justificado otras barbaridades en aquellas épocas.

Es muy fácil criticar los "valores occidentales" en contraposición con otros a los que denomina "los nuestros" sin siquiera definir cuales son los suyos. Y, hasta donde alcanza la mente, estos señores no desprecian los valores occidentales sino que los entienden a su manera con la bendita y generosa ley del embudo. Estoy seguro que ninguno de los aymaras que quemaron la contraloría (ojo, no la comisaría, la telefónica, el poder judicial sino la contraloría que es la entidad más anodina para el pueblo en general)profesa ese desprecio a su propiedad privada como quiere creer este señor.

Como tampoco creo que él desprecie la suya propia. Es fácil hablar de comunitarismo cuando uno no vive los costos de lo que predica.

Finalmente, no resulta ser serio el vender sebo de culebra. Humala fue elegido por eventos coyunturales y no es "el hito revolucionario" que se quiere ver. Y tampoco es serio cuando se quiere argumentar el comunitarismo para encubrir lo que es un objetivo político basado en los más miserables intereses económicos y políticos.

Es evidente que el no a la minería lo impulsan líderes respaldados por la gran masa de mineros ilegales, por ejemplo, y que quieren seguir siendo ilegales para disfrutar las ganancias de esa actividad. Acá no se trata de revoluciones ni otras pamplinas, acá lo que se necesita es reponer el principio de autoridad en toda su extensión para evitar la existencia de feudos en los que los beneficiarios se escudan en su "peculiaridad cultural".

Afirmar la existencia de "valores culturales" específicos para un territorio pequeñísimo y que justifiquen el robo, la intolerancia, el abuso, la destrucción y el caos es una cuestión irracional en cualquier lado del planeta. Esas cosas no se pueden creer ni a ellos ni a los ingenuos (auténticos o interesados) que como el señor Alvizuri creen ver, en un grupo de delincuentes, una revolución cultural.

Luis Enrique Alvizuri dijo...

En el texto del señor Chalo se reconoce a la voz del patrón. No hay más que decir.

Guillermo dijo...

Ninguna teoría por mas justa que parezca puede avalar los destrozos sucedidos en Puno, no existe forma de justificar los desmanes ni la violencia, y en cuanto a la elección de Humala este responde solamente a que un 20 por ciento de peruanos no quería a Keiko como presidenta, su verdadera votación solo corresponde al 31 por ciento que saco en la primera vuelta, es decir que un mayoritario 69 por ciento no esta de acuerdo con el proyecto primario de Humala, y esa es la lectura que tuvieron los jefes de campaña que obligaron a cambiar y salir con la carta compromiso, hoja de ruta y su juramento ante la biblia, la lectura correcta es que el peruano en su mayoría no quiere un cambio, que el modelo debe mejorar si, pero cambiarse no