jueves, 14 de enero de 2010

LA INFANTILIZACIÓN DE LA POLÍTICA/ Carlos Iván Degregori


Zonzos, tontos, me espían porque me envidian, bailo porque tengo mejor ritmo que ustedes, tristes, reprimidos, amargados, pesimistas. Tengo una encuesta secreta, enorme, muuucho más grande que la de los otros muchachos que coleccionan encuestas. El 2009 se cerró y el 2010 se abrió con una andanada de esta suerte de bromas de alumno quedado de colegio para niños sin calle.

Uno de los rasgos que pasa desapercibido cuando se analiza “la política después de la política” es su infantilización. Se ha insistido bastante en la transformación de los viejos caudillos en líderes mediáticos, performers de la industria del entretenimiento, modelados por los medios y a su vez dedicados a modelar a la opinión pública a través de esos mismos medios, a veces de forma delincuencial como en los tiempos de Fujimori. Pero poco se ha dicho una de las consecuencias de esa mediatización de la política, al menos en nuestro país: su infantilización o, en el mejor de los casos, su transformación en mala película de adolescentes.

“Las encuestadoras están piconas porque no las han invitado”, interviene Jorge del Castillo, como para refrendarlo (La República, 6.1.10). La tendencia viene de antes. Se hizo visible, y quién sabe irreversible, cuando los imitadores comenzaron a parecer los titulares de carteras o curules, y los firmes, una caricatura de sus imitadores radiales o televisivos. Se volvió descarada con el Baile del Chino, y continúa. De bailar, Alan lo hace mejor. El Chino, que parecía un teletubie, para no recordar a Tudela van Breughel-Douglas. Pero las líneas de continuidad son visibles. SIGUE…

2 comentarios:

Chicho dijo...

agregaría quiza, que los medios de comunicación (prensa escrita, radial, televisiva) ayudan notablemente como rebote de esa infantilización de la política a la caul hace usted referencia.

no obstante, la variada moral con la que cuentan los dichos medios comunicacionales hace que al dia siguiente publiquen también ecnuestas de desaprobación de los mismos cuestionados personajes políticos, a partir de "lo que opina la gente"

a las pruebas me remito.

wally lavigne dijo...

Tal cual! no se de que país es pero acá en Argentina esta pasando esto y seguramente en muchos países mas.